La enseñanza pasada entendimos que Cristo como nuestro
Señor y amo está interesado hasta en nuestras relaciones personales, todas y
cada una de ellas, el cortejo prematrimonial, el matrimonio, los negocios, las
amistades y cuando nosotros somos más influenciados por relaciones con
inconversos entonces estamos en yugo
desigual.
Vimos también que en la cultura grecorromana la calidad de vida del
esclavo dependía mayormente del carácter de su dueño, había amos crueles y
sanguinarios que no valoraban en lo más mínimo la vida de sus esclavos, los
maltrataban sin piedad ni razón.
Había también amos bondadosos que trataban
amorosamente a sus esclavos y les otorgaban muchos privilegios, al grado de
considerarlos hasta como sus amigos y ese el caso con nuestro Señor, no solo es
nuestro Dueño, también nos ofrece su amistad.
El día de hoy nos vamos a enfocar en un aspecto
fundamental en toda relación incluyendo la amistad: La comunicación.
La comunicación es básica para todo tipo de
relación interpersonal, muchos matrimonios fracasan por falta de comunicación,
muchas amistades se ven deshechas por la falta de comunicación, es por este
motivo principalmente que las relaciones a distancia son frías y tienden a
desaparecer, por la falta de comunicación.
Por el otro lado, los matrimonios más sólidos son
aquellos que DIOS en su gracia a sostenido principalmente por medio de una
buena comunicación, las relaciones de amistad más fuertes son aquellas donde
hay más comunicación, la comunicación es fundamental por un gran aspecto: permite conocer profundamente con quien nos
comunicamos.
Lamentablemente la sociedad en general y el cristianismo en particular
se está viendo gravemente atacados por la falta de comunicación personal debido
en parte a los estilos de vida cada vez más ajetreados y también por los
adelantos tecnológicos que nos están robando el contacto personal y lo están
sustituyendo por relaciones virtuales.
Ya hasta los cristianos no oran más a DIOS en privado, a solas con Él,
ahora lo hacen por medio de las redes sociales, es una verdadera lástima.
Toda relación fuerte, sana y duradera está basada sobre una excelente
comunicación, la comunicación tiene tres elementos emisor, receptor y mensaje.
DIOS (Emisor) se comunica con notros (receptores) por medio de la
Escritura (lenguaje), y recíprocamente nosotros (emisores) nos comunicamos con
DIOS (Receptor) por medio de la oración (lenguaje).
Y es en esta segunda vía en la que nos vamos a enfocar en los siguientes
minutos: la oración de los cristianos a DIOS.
·
¿Por qué no
nos gusta orar?
·
¿Por qué
pasa tan lento el tiempo de oración?
·
¿Por qué
somos intermitentes en nuestras oraciones?
·
¿Por qué
los servicios de oración son los de menor asistencia?
·
¿Por qué
preferimos conciertos de alabanza a vigilias de oración?
·
¿Por qué se
vuelve una carga pesada y una obligación religiosa orar todos los días?
·
¿Por qué no
puedo intimar de verdad con DIOS?
La respuesta a todas es solo una, NO CONOCEMOS A DIOS y cuando no conocemos
alguien nos es difícil pasar tiempo y mucho más tener intimidad con Él.
La vida eterna se trata de conocer a DIOS Juan 17.3, la vida eterna no empieza al morir e ir al cielo y
entrar en la Gloria, la vida eterna comienza cuando por su gracia DIOS nos hace
nacer de nuevo, el tiempo que estamos en este mundo entre nuestra nueva vida y
el ir al cielo es solo un tiempo de ensayo, de preparación para lo que vamos a
hacer en la eternidad: CONOCER MÁS Y MÁS A DIOS.
¿De verdad nos alegra el saber que
estaremos en la eternidad con DIOS?
¿Sinceramente nos emociona el saber que
iremos al cielo a su presencia?
O ¿solo sentimos alivio de que no iremos
al infierno?
¿Cómo pasaremos una eternidad con alguien
que no podemos estar en oración 1 hora?
Uno de los aspectos más difíciles en la vida de muchos cristianos es pasar tiempo a solas con DIOS en oración, muchos
en su vida de oración están más fríos que un
pescado en la viga en época de cuaresma.
Gente que va a los servicios de oración por cumplir un requisito
ministerial, pero que su corazón y sus pensamientos están en otro lado, porque
no oran, se aburren, bostezan, casi se duermen, pero por decir una o dos veces
Amén a la oración de alguien más piensan que ya cumplieron, esto pasa por que
el legalismo convierte la oración en una monotonía espiritual, en una plática
aburrida donde ni siquiera crees que eres escuchado por DIOS.
O acaso ¿Hay algo que está estorbando nuestras oraciones? 1ª Pedro 3.7.
La palabra estorbo en el griego es ekkopto significa impedir el paso,
poner una dificultad, poner un obstáculo para hacer las cosas.
Son varios los motivos por los cuales tenemos dificultades para llevar
una vida de oración:
·
Los
problemas de la vida cotidiana. Como cristianos NO estamos exentos de ellos,
por el contrario, si en verdad somos esclavos de cristo esos problemas irán en
aumento y es precisamente por ello que la comunicación con nuestro Señor
Jesucristo es fundamental. Mateo 11:28.
·
La
impaciencia. El ritmo y estilo de vida en la actualidad nos hace creer que todo
debe ser a la velocidad de la luz, esperamos respuestas inmediatas a nuestras
oraciones y cuando estás tardan el tiempo perfecto de DIOS en llegar nos
impacientamos y desistimos de orar. Daniel
10.1-13.
·
Pereza y
apatía espiritual. Definitivamente somos perezosos y/o apáticos y creemos que
basta con un: “gracias DIOS” en las mañanas y en las noches y en cada comida. Mateo 26:39-44.
·
Incredulidad.
Oramos a DIOS, pero no creemos que Él nos escuche o peor aún que él existe,
esto es principalmente por falta de renovar nuestras mentes pues en el mundo
actual somos bombardeados con ideas ateístas por doquier. Santiago 1:6. Hebreos 11:6.
·
Pleitos con
nuestros semejantes. Mateo 5.23-24. Al
igual que Pedro, mateo nos dice que nuestras ofrendas y oraciones pueden ser
estorbadas por la falta de conciliar pleitos, si no perdonamos a los que nos
ofenden no vamos nunca a creer que somos perdonados por DIOS, esto trae
sentimientos de culpa, los cuales nos alejan cada vez más y más de una relación
con DIOS. Romanos 8:1.
·
Desánimo por
la falta de una respuesta a nuestro modo.
Lucas 18:1-8. La oración no tiene como propósito cambiar la voluntad de DIOS la
oración tiene como propósito cambiarnos a nosotros.
Si pensamos que nuestras oraciones cambian los planes o la voluntad de
DIOS es porque aún no entendemos a fondo lo que es la Soberanía divina, la
oración es para que aprendamos a descansar en DIOS.
DIOS EN SU INFINITA SABIDURÍA Y BONDAD NOS DA
LO QUE NECESITAMOS, no necesariamente lo que le pidamos.
·
LOS PECADOS DE LA CARNE. Génesis
3:8-10. Tal vez el mayor estorbo en llevar una vida de oración son los
pecados de la carne que inevitablemente todos aún cometemos, nos hacen actuar
como Adán, en vez de correr hacia DIOS y confesar nuestros pecados, nos
alejamos más y más de Él.
Creemos que, si vamos hacia DIOS, él nos va a dar la espalda y nos va a
rechazar pues aun pensamos que hicimos algo para ser elegidos como sus hijos,
nada más alejado de la verdad de la Escritura, no hay nada que podamos hacer
para que DIOS “nos acepte más” ni para que DIOS nos rechace, pues no es por
nuestros méritos, es por los de Cristo.
Ciertamente DIOS es Santo, Santo, Santo y los pecados que cometemos son
desagradables a Él, pero DIOS no nos da la espalda y nos deja desamparados pues
ya lo hizo, DIOS abandonó a su Hijo en la Cruz, para que nosotros podamos ser
siempre aceptados en su presencia. Mateo
27:46.
Como dije al inicio, si no hay comunicación no podemos
llegar a conocer a alguien realmente, y con DIOS no es la excepción, sin
embargo, aun la vemos como el último recurso, frases como: ya solo me queda orar por tal o
cual situación son frecuentes entre nosotros por no darle el real valor
a la oración: es la plática amena entre
dos amigos.
¿Cómo es tu vida de oración?
¿Rutina y repetición?
¿Aburrimiento y cansancio?
¿Tienes mejores cosas que hacer que venir i orar los lunes?
Fácilmente se puede caer en la rutina de la oración cuando pensamos que
tenemos el deber de orar y no el deleite de tener una relación íntima de
amistad con Cristo.
¿Has pasado tiempo platicando con alguien cuya conversación es tan
amena, tan placentera, tan agradable que se te van las horas como si fueran
minutos? ¿Qué pasaría si ahora te
obligaran a platicar con esa persona todos los días, a la misma hora, las
mismas palabras, el mismo tiempo, de la misma forma, y de los mismos temas?
Dejaría de ser agradable y se convertiría en una carga.
Sin embargo, este escenario es una ilustración exacta de la vida de
oración de muchos cristianos. Deciden orar a la misma hora y de la misma forma
todos los días. Esta vida de oración está construida alrededor de una fórmula,
se disciplinan a sí mismos a esta rutina, ya sea que su corazón esté en ello o
no. Creemos que no rezamos, pero la realidad es que no rezamos rezos católicos,
pero si hacemos nuestros propios rezos. Mateo
6.7.
Más que la acción de orar, es la actitud con la que oramos, no es cuanto
oras o si oras más bonito que antes, sino en que ahora tienes el entendimiento
de que tienes una relación de amistad con DIOS al orar.
Por eso 1ª Tesalonicenses 5:17 dice
ORAD
SI CESAR.
Tú no tienes comunicación con la persona que amas (y menos en esta época
con redes sociales, celulares, etc.) solo una vez al día, buscas e ideas la manera
de comunicarte varias veces y de distintas maneras.
De igual forma es con DIOS, no es que te la pases orando todo el día, sino que aprovecharas cualquier
instante para estar en comunicación con DIOS, con frases cortas, pero desde el
fondo del corazón, con oraciones más elaboradas cuando hay tiempo, con platicas
amenas en nuestras actividades diarias, tal vez hasta tomar un café con DIOS.
Hay personas que han perdido a un ser amado y durante un tiempo se la
pasan platicando con él/ella como si todavía estuviera ahí, dicen que pueden
sentir como los escuchan y que saben que están ahí con ellos, eso es una
mentira y una práctica anti cristiana, ni digo que el dolor por perder a un ser
querido sea malo, lo que no es correcto es ese tipo de catarsis, pues en vez de
correr a los brazos de Cristo corremos a aferrarnos a quien ya no está con
nosotros.
Pero de este tipo de situaciones aprendemos la forma en que podemos
estar en una comunicación continua con nuestro Señor y Amigo Jesucristo,
aprovechar en todo momento y en todo lugar para platicar con él.
Jesucristo como nuestro amigo nos escucha siempre, no caigamos en el
error de pensar que son cosas triviales, para eso están los amigos para
escuchar aún lo más trivial de nuestras vidas. Mateo 10:30 dice que nuestros cabellos le interesan al grado de
contarlos uno por uno…cuanto y más lo que pensamos, lo que sentimos, lo que
hacemos, etc.
En la medida que renovemos nuestras mentes
para ver a Cristo como nuestro Amigo, la oración cada vez será más placentera,
más amena, será una agradable plática con aquel Amigo que nos amó al grado de
dar su vida por sus esclavos y amigos. Juan 15:13.
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