domingo, 25 de enero de 2015

La Obra Del Espíritu 5: Llevarnos A La Verdad. Juan 18:37-38.

Desde hace unas semanas atrás venimos estudiando a la luz de las escrituras lo que en realidad es la obra del Espíritu Santo en la iglesia, sobre todo por las múltiples nuevas revelaciones, doctrinas, profecías, etc. que están invadiendo la iglesia del Señor.

En la actualidad se por sentado que los sentimientos o las emociones son los que determinan si una  obra es del Espíritu o no, cuando esos son parámetros totalmente subjetivos, la única manera de saber si algo es del Espíritu es por medio de la Biblia.

Hace ya más de 300 años en los Estado Unidos se dio un movimiento de avivamiento llamado el gran despertar, en el cual al igual que ahora el emocionalismo y la falsificación se dieron por mayoreo, fue en ese entonces que Jonathan Edwards basado en la primera carta universal del apóstol Juan delineo 5 pruebas definitorias y obviamente basadas en la biblia para saber si es una obra del Espíritu o no.

Las tres primeras pruebas que ya hemos estudiados son:

·         Llevarnos a Cristo.
·         Oponerse a lo mundano.
·         Llevarnos a las escrituras.

La cuarta prueba  para verificar y autentificar un movimiento inspirado en realidad por el Espíritu Santo es que NOS LLEVA A LA VERDAD.

Más específicamente hablando la pregunta debe de ser ¿Está obra destaca la verdad espiritual y la claridad doctrinal o crea confusión y promueve el error?

En 1ª Juan 4.6 el apóstol escribe “conocemos el espíritu de verdad y el espíritu del error”

El Espíritu santo es por definición bíblica la verdad: Juan 16:13. 
Al igual que Jesús: Juan 14:6.

Teológicamente, se entiende por verdad la revelación de Dios que culmina en Jesucristo y que se transmite hasta nuestros días. En el Antiguo Testamento, la verdad se expresa como emet, que gradualmente derivó en amén: así es, es cierto, es verdad.

El Espíritu Santo se caracteriza por marcar un gran contraste con los espíritus de engaño y error, un movimiento espiritual debe de estar definido por defender la sana doctrina, denunciar las falsas enseñanzas y rechazar la unidad superficial que da el contentamiento con el error doctrinal.

Sin embargo muchos se conforman con palabras que parecieran ser prudentes pero que no son bíblicas al respecto de estos temas:

·         No juzgues su doctrina, mejor ve su corazón.
·         No somos nadie para criticar.
·         Al final todos servimos al mismo DIOS.
·         Lo que en realidad debió haber querido decir fue que….
·         No seamos fariseos y dejemos el juicio a DIOS.
·         No necesitamos teología, solo necesitamos conocer a Jesús.
·         Mejor amémonos unos a otros en vez de criticar.
·         DIOS no está obsesionado con la doctrina, él lo está con el corazón.

La realidad es que muchas iglesias dicen ser llenas del Espíritu Santo pero la verdad biblia no es una de sus características, al igual que los gnósticos de la época de Jesús ven la verdad como algo inalcanzable: Juan 18:37-38.

Algo que he aprendido es que nadie tiene toda la verdad.  Es una frase que parece muy espiritual pero que en realidad es muy gnóstica, los gnósticos, fueron una corriente filosófica griega, que tenía por sumo bien el conocimiento de la verdad suprema, lo cual según ellos era imposible de alcanzar al 100% por los seres humanos, ese pensamiento se ha infiltrado en muchos líderes de la iglesia moderna.

Recordemos siempre que Cristo es la verdad, su palabra es la Verdad y el Espíritu Santo además de ser  Verdad nos guía a TODA VERDAD, esto no significa que somos los únicos o los mejores o que no hay otra iglesia o movimiento aparte del nuestro donde sean salvos,  significa que no es malo diferir en liturgia, pero es inaceptable diferir en doctrina.


Podemos diferir en:
Debemos estar de acuerdo en:
Eclesiología.
Teología.
Escatología.
Cristología.
Angeología.
Pneumatologia.
Demonología.
Soteriología.


A nivel práctico muchas iglesias sobre todo las carismáticas y pentecostales  elevan la experiencia por encima de la verdad (ya no se siente la presencia de DIOS tan fuerte como antes)  se animan formas de culto sin sentido y fuera de orden y control.

A partir de 1960 aproximadamente el movimiento de renovación carismática (cristianos supuestamente) acepto en sus filas al movimiento carismático católicoy por que “creen en los dones del Espíritu” se consideran nuestros hermanos.  Hay hasta incluso carismáticos mormones.

Para ejemplo está la loca y anti bíblica afirmación de Benny Hinn de que en realidad la Tri-Unidad  (Trinidad) son en realidad 9 seres: 3 en el Padre, 3 en el Hijo y 3 en el Espíritu Santo, algo que es una  blasfemia total, sin embargo como Benny “hace muchos milagros”  entonces no pasa nada.

El discernimiento doctrinal y la responsabilidad teológica brilla por su ausencia en muchas iglesias modernas, que toleran casi cualquier cosa bajo el lema “no limitemos al espíritu”  prefieren largos servicios llenos de experiencias místicas que discipular doctrinalmente al pueblo de DIOS, tal pareciera que están como en la época de los jueces: Jueces 21:25.

Muchos van al revés de cómo deberían ser las cosas, en lugar de ser la biblia quien nos diga que hacer, ellos le dicen que hacer a la biblia, primero tiene una experiencia religiosa y luego buscan apoyo en la palabra, Uno de sus líderes  lo dice de esta manera: No tome el control, no se resista, no analice, simplemente entréguese a su amor. Se puede analizar la experiencia más tarde, pero ahora solo deje que suceda.

Una Verdadera Obra Del Espíritu Se Nutre De La Sana Doctrina. Promueve La Verdad Bíblica, No La Descarta O La Ve Como Una Amenaza.

No se debe permitir que las experiencias sean la prueba de la verdad, o el subjetivismo hará presa de la iglesia, y la sana doctrina basada en la biblia  ya no será quien nos guie,  debe de ser la verdad revelada en las escrituras la que pruebe las experiencias religiosas.

Muchos minimizan la doctrina por la misma razón que degradan la Biblia: piensan que alguna preocupación por lo eterno y la verdad objetiva sofoca la obra del Espíritu (es tratar de meterlo en una caja dicen algunos).

Ellos prevén el ministerio del Espíritu como algo que fluye libre, infinitamente maleable, tan subjetivo como para desafiar la definición. Los credos, las confesiones de fe y la teología sistemática son vistos como un estrecho confinamiento, sin ser lo bastante flexibles como para que el Espíritu obre dentro de ellos. (Salen con el ya clásico la letra mata).
La sana doctrina es el mayor antídoto contra cualquier desviación de la verdad. Recuerde, el Espíritu Santo es el Espíritu de verdad (Juan 16.13). Cualquier obra suya exaltará la verdad bíblica y la sana doctrina en los corazones y las mentes de su pueblo.

Una iglesia que no está preocupada y comprometida con  la sana doctrina, por mucho que diga que en ella reina  el Espíritu Santo, en realidad lo que reina son las emociones subjetivas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Un Dios Santo 11: Contender con Dios Parte 1. Habacuc 1:2-4.

La máxima expresión de la ira y la justicia de Dios se pueden ver en la cruz del calvario, es ahí donde la justicia santa de Dios se hace ...