lunes, 16 de mayo de 2016

El Fruto Del Espíritu 15: Fe Regeneradora. Santiago 2:14.

La semana pasada comenzamos a estudiar la séptima característica del fruto que el Espíritu Santo produce en nuestras vidas, esa característica es la Fe.

Ya quedo establecido que todos los seres humanos tenemos Fe, por eso es que a pesar de no ser cristianos usan frases como hasta mañana, pero es una Fe natural que fácilmente puede ser revocada por alguna contrariedad de la vida.

En cambio, la Fe salvífica, es aquel tipo especial de Fe que DIOS da como un regalo, nosotros no creemos en Cristo por nuestra propia Fe, aún la Fe con la que creemos para salvación es dada por DIOS. La Fe salvífica, como ya lo estudiamos tiene dos características: Certeza y convicción. Hebreos 11:1.

Certeza del griego hupostasis: sustancia, garantía, confianza, y convicción del griego elencos que significa convicto, convencido, compungido. La Fe salvífica es la acción interna (elencos) de la Palabra de DIOS en nuestros corazones y la respuesta externa (hupostasis) de un cambio radical de vida. Hechos 2:36-42.

El día de hoy complementaremos la enseñanza de la semana pasada con el tema titulado: Fe regeneradora.

Ya entendimos la palabra Fe: del griego pistis que significa una convicción y una fuerte confianza.

La palabra regeneración del griego palingenesia (παλιγγενεσία, G3824), significa literalmente nuevo nacimiento, volver a nacer, volver a generar. Tito 3:4-5.

Hay un gran problema en el cristianismo de la actualidad, y es que muchos están siendo engañados a creer que son salvos, que son hijos de DIOS que han sido regenerados, cuando la cruda realidad es que no lo son.

Hay un supuesto avivamiento que va acompañado de predicadores o evangelistas que dan unos falsos mensajes, distorsionan la verdad del evangelio y por ello es que cada día incontable número de personas pasan a una eternidad incierta (por no decir crudamente que van al infierno) creyendo lo contrario, sin embargo, su estilo de vida es incompatible con la verdad de DIOS: Sin Santidad Nadie Verá Al Señor. Hebreos 12.14.

Es por este motivo que predico con furia cada vez que expongo una falsa enseñanza, pues a pesar de que no fuera enseñada con malas intenciones una herejía, aun así, no deja de ser peligrosa, y lo que peligra es nuestro futuro eterno.

En base a falsas doctrinas es que el decir soy cristiano se ha devaluado mucho en la actualidad, ser cristiano conforme a la biblia es ser antes que nada un discípulo, de hecho, la palabra cristiano aparece solo 3 veces en la biblia mientras que la palabra discípulo aparece más de 200 veces en el nuevo testamento

Son cada vez más las personas que creen tener seguro su pase al cielo, pues asisten a alguna iglesia, o porque dan dinero a los predicadores, otros más piensan que porque hicieron su oración de fe son salvos, pero la realidad es que el cristianismo que viven este tipo de personas es un cristianismo carnal.

No les incomodan los pecados de la carne, no les hace sentir mal cuando caen, es más muchos esperan el fin de semana para perderse en los vicios de la carne y no les pesa en lo más mínimo, son el tipo de cristianos que no saben los libros de la biblia, no conocen a Cristo ni su evangelio y NO les interesa conocerlo pues NO hacen nada para remediarlo.

Muchos de este tipo son los que se dicen cristianos, aunque algunos ni siquiera son nacidos de nuevo, no son regenerados, pues nunca han dado fruto de serlo, nunca se ha suscitado un cambio milagroso en su forma de vida, solo adoptaron el cristianismo como nueva religión, pero CRISTO NO ES SU VIDA.

Ven la iglesia como un bálsamo para sus problemas y ven a los pastores como aquellos designados por DIOS para que les ayudemos en sus problemas, pero una vez que sus vidas se arreglan regresan al mundo y sus placeres, son en el mejor de los casos niños espirituales. Hebreos 5:11-13.

Los Corintios son el molde de la iglesia en la actualidad, muchos dones, mucho mover, mucho fluir en el Espíritu y también MUCHAS OBRAS CARNALES en sus miembros:

·         Peleaban por presumir quien era mejor. 1ª Corintios 1.11-13.
·         Inmoralidad sexual grave tolerada: 1ª Corintios 5.1.
·         Pleitos entre hermanos frente a las autoridades civiles: 1ª Corintios 6:1-5.
·         Presumidos en cuanto al conocimiento: 1ª Corintios 8:1-2.
·         Abusos en la cena del Señor: 1ª Corintios 11:17-22.
·         Jactanciosos en cuanto a los dones: 1ª Corintios 14:18.
·         Errantes en cuanto a doctrina fundamental: la resurrección de Cristo: 1ª Corintios 15.

Comparados los “problemas” de la iglesia contemporánea con la primera iglesia, dan vergüenza, pues vivimos un cristianismo muy egocéntrico:

·         Quiere a Cristo y sus pecados compartiendo la misma vida.
·         A Cristo y la comodidad mundana al mismo tiempo.
·         Quieren a Cristo y su éxito siendo los dos igualmente exitosos.
·         La fama de Cristo para ser famosos, pero no a Cristo en sí.

Lo más importante no es solo conocer superficialmente a Jesús sino seguir a Jesús, muchos le conocieron; judas, los fariseos, Pilatos, etc. pero no le seguían.

Muchos quieren amar su reino celestial, pero pocos aman su cruz, muchos aman su consuelo, pero pocos anhelan sufrir por Él, muchos anhelan su banquete, pero pocos comparten su ayuno, todos quieren gozarse con Él, pero pocos están dispuestos a sufrir lo que sea por Él, lo siguen para compartir el pan, pero no para beber la copa del dolor, muchos son los que aman a Jesús siempre y cuando las cosas no vayan mal.

Hay quienes obedecen a DIOS, pero no se niegan a sí mismos, como el profeta Jonás. Hacen las cosas, obedecen a DIOS, siguen sus mandamientos, pero en realidad es solo algo externo, no hay un cambio interno, no lo genera el Espíritu de DIOS en nosotros. Jonás 4:1-3.

Llevar la cruz es aceptar el Señorío de Cristo de forma voluntaria, es aceptar su buena, agradable y perfecta voluntad, renunciando a nuestra propia vida, es entender que cueste lo que cueste, es preferible estar con Cristo por sobre todas las circunstancias.

La fe salvífica tiene una hermana gemela llamada Fe regeneradora, si decimos creer en Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, entonces indudablemente daremos fruto de esa Fe. A la Fe regeneradora comúnmente se le conoce como ARREPENTIMIENTO.

En Santiago 2:17. Vemos que la Fe sin “obras” es muerta. Las obras a las que se refiere Santiago son el fruto de tener Fe, se refiere al arrepentimiento.

La esencia del arrepentimiento no solo es tratar de portarnos bien o de echarle ganas para dejar lo malo, el verdadero arrepentimiento es solo obra del Espíritu Santo en nuestros corazones: Romanos 8:13-14.

Muchos confunden moralismo con arrepentimiento, el moralismo es un código de conducta, es donde nosotros por nuestros propios medios hacemos o tratamos de hacer las cosas correctamente. ¿Qué tiene eso de malo? NADA, por el contrario, es muy bueno, pero NO ES EN CRISTO y esa es la raíz del problema con el moralismo.

Un ejemplo de moralismo son los activistas sociales, muchos cantantes famosos son activistas, como Bono de U2 o John Lennon, por ejemplo, en su canción imagina John describe una sociedad ideal en la cual no hay cielo ni infierno, en la cual no hay fronteras ni países, no hay pobreza solo paz, no hay hambruna ni discriminación, solo hermandad, en la cual no hay posesiones ni riqueza ni pobreza.

De hecho, John Lennon es claro ejemplo de doble moral, pues era dueño de varios departamentos, una hacienda y varios millones en cabezas de ganado, por si fuera poco, golpeaba a su primera esposa y a su hijo Julian de forma despiadada.

Lo que John Lennon y cualquier moralista viven no es ARREPENTIMIENTO, solo tratan de seguir un código de reglas y normas para una mejor forma de vida, a eso la biblia les llama buenas obras, pero las buenas obras NO SALVARÁN A NADIE, pues en el mejor de los casos nuestras buenas obras delante de DIOS son como trapos de inmundicia. Isaías 64.6.

Buenas obras no son lo que el cristianismo demanda, para ser cristiano no se necesita vivir una vida moralmente buena, se necesita NACER DE NUEVO, se necesita SER REGENERADOS POR DIOS por medio de la Fe. Juan 3:1-5.

Las personas regeneradas son imposibles de ignorar se les nota a la distancia que son nuevas criaturas, que nacieron de nuevo, su arrepentimiento da testimonio de la Fe salvífica. Si se decimos que somos regenerados, pero vivimos exactamente igual que antes, habituados al pecado, estamos engañados.

Las palabras que leemos en Santiago 2.14-17. Son solo un ejemplo de que la Fe sin fruto es nula, la Fe salvífica va siempre de la mano con la Fe regeneradora, de no ser así no es válida ninguna de las dos.

La Fe salvífica es aferrarse a la obra de Jesucristo en la cruz del calvario, es creer con todas nuestras fuerzas que Cristo es nuestra justicia, es tomarnos de su promesa de salvación y vivir agradecidos por ello.

La Fe regeneradora da testimonio de que creemos en la obra de Cristo, es una vida trasformada, una vida en la cual la perfección no es el sello sino la humildad de admitir que necesitamos cada día más de Cristo y anhelar siempre ser más como cristo y conocerle más.

Las buenas obras no son para ser salvo, sino que son el resultado de ser salvos.

La salvación no fue, no es y no será nunca por obras, el resultado de mi salvación son las obras, en otras palabras, se nota que soy salvo por las obras de la fe:  Fruto de arrepentimiento.

Delante de DIOS somos justificados por medio de la Fe en Cristo, y esa Fe da fruto el cual se ve delante de los que nos rodean, algo así como la faceta interna y externa de la Fe, interna para con DIOS y externa para con los hombres. Por lo tanto, una persona que afirma creerle a DIOS pero que vive sin fruto externo de ello lo más probable es que no tiene una Fe salvadora.

¿Cómo saber si somos cristianos? Porque tenemos las dos facetas, interna y externa de la Fe, decimos creerle a DIOS que somos salvos por la obra de Cristo en la Cruz y por lo tanto mostramos fruto de arrepentimiento.

Hay personas que solo demuestran la faceta externa, es decir, llevan vidas ejemplares, buenos esposos, excelentes padres, proveedores de su hogar, no roban o calumnian, en pocas palabras su comportamiento es mejor que el de muchos “cristianos” sin embargo eso no los hace salvos pues la faceta interna, el creerle a DIOS en su plan redentor no lo tienen, si se comportan bien es por tener valores morales solamente, lo cual no es malo en sí mismo, pero tampoco es suficiente para ser salvo.

La manera sencilla y practica para vivir una vida arrepentida es teniendo una relación Padre-hijo con DIOS, de hecho, la palabra griega para hijo es huios y significa el que tiene una relación con su padre, esa relación con nuestro Papá en el cielo se da cuando leemos su palabra, cuando oramos en su presencia, cuando asistimos a su casa a adorar, etc.

Cuando DIOS nos regenera por medio del nuevo nacimiento, una de las características que nos lo demuestran es que ya no podemos pecar a gusto, desde ese momento en adelante cada vez que hacemos algo en contra de la ley y el carácter justo y santo de DIOS nos sentimos mal en nuestro espíritu, pues el Espíritu Santo nos está redarguyendo: 2ª Corintios 7:9-10.

El tiempo de cambiar de vida, de propósito, de actitud ha llegado a nuestras vidas, DIOS nos ofrece vida abundante por medio de Cristo, el único requisito es el arrepentimiento, no importa cuánto mal hayamos hecho en nuestras vidas, si nos rendimos a los pies de Cristo entonces DIOS es fiel y justo para perdonarnos: Salmos 25:11, 1ª Juan 1:9.








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