La semana pasada comenzamos esta serie de
predicaciones expositivas aclarando que significan, por qué son necesarias este
tipo de predicaciones y cuál es su diferencia con las predicaciones del mundo
cristiano cultural actual, además nos adentramos en la vida del autor, el
discípulo amado, que compartió con Jesús tiempo de trabajo, tiempo de oración y
tiempos de sufrimiento, lo cual lo llevó a ser no solo el amado, sino a ser
considerado columna dentro de la primera iglesia cristiana.
El evangelio de Juan como ya lo mencionamos la semana
pasada es muy diferente en estilo y contenido de los otros tres evangelios
considerados sinópticos, en Juan, a diferencia de Mateo, Marcos y de Lucas, el
comienzo no es con la genealogía, concepción y nacimiento del Señor, Juan va
mucho más atrás, Juan va al comienzo mismo, emulando el primer libro de Moisés.
Génesis 1:1.
Juan, como ya lo mencionamos hace una semana, escribió
su evangelio en medio de muchas herejías, gnósticos y ebionitas brotaban por
doquier, los gnósticos no creían que Cristo fuera un ser humano por completo
y por su parte los ebionitas negaban la divinidad total del Señor Jesucristo.
Ambas, la humanidad y la divinidad en la misma persona
son conocida como la unión hipostática, y son
FUNDAMENTALES Y NECESARIAS para que nuestra redención en la cruz del calvario
sea perfecta, si Cristo no es 100% un ser humano no hubiera derramado su
preciosa sangre y sin derramamiento no hay perdón de pecados y si no es 100%
DIOS su sacrificio en la cruz no hubiera sido suficientemente valioso, le
faltaría mérito, por lo tanto, los cristianos ortodoxos creemos que Cristo es
al mismo tiempo 100% Hombre y 100% DIOS.
Juan tenia esto en mente cuando escribió el prólogo de
su evangelio, había quienes negaban que Cristo fuese DIOS, afirmaban que era un
ser superior a toda la creación, pero inferior al Padre en divinidad, lo cual
es una HEREJÍA mayúscula, la cual
Juan contrarresta con la frase: En el principio (ligándola a la creación con
Gn. 1.1) era el Verbo, de esta manera le atribuye su correcta
eternidad.
El Verbo.
Lo siguiente que nos muestra el apóstol Juan es que a
nuestro Señor antes de encarnarse se la conoce como El Verbo.
¿Porque EL VERBO?
¿Qué significa este título?
¿De qué nos habla?
La Palabra Verbo en nuestro idioma, se tradujo del
griego Logos que también se traduce
como Palabra, mensaje, expresión, discurso, Razón o Sabiduría, Juan usa este
vocablo aun a pesar de que los herejes y aun los filósofos de su época ya lo
utilizaban, aunque con un significado diferente al que él le otorga.
Filón, un notable “filosofo
cristiano” de Alejandría del primer siglo, usó el término Logos en sus
escritos en más de 1300 ocasiones, pero nunca le dio un significado bien
definido, algunas veces usaba el Logos como si fuera un atributo más de DIOS,
otra usaba el Logos como si fuera en puente entre DIOS y los seres humanos, y
varias más.
Filón cometía el error de alegorizar la Escritura, y
en pasajes como el de Génesis 3:24, interpreta
a los Querubines como dos atributos divinos, soberanía y misericordia, y la
espada en sus manos en el Logos o la Razón que une a ambas.
Es necesario hablar de pensamientos como el de Filón,
pues al igual que muchos han tratado no solo de entender la Escritura con un
filtro de pensamiento helenista, occidental y en nuestros casos modernizado, lo
cual es el camino seguro al error hermenéutico, el filtro de pensamiento para
entender la Escritura es el judío o Semita.
El pensamiento semita, nos presenta desde el Antiguo
testamento al Verbo de DIOS como una
Persona: Salmos 33.6. Proverbios 8:27-30.
El término Verbo aparece en el Nuevo Testamento para
designar a Cristo antes de su Encarnación en otros pasajes más, todos del
apóstol Juan:
·
Juan
1.1.
·
Juan
1:14.
·
1ª
Juan 1:1-3.
·
Apocalipsis
19:13.
EL VERBO es una Persona, no un pensamiento, no una idea, no un atributo,
no un puente inerte entre DIOS y el ser humano, el VERBO es Jesucristo el HIJO
DE DIOS, Segunda persona de la Trinidad divina.
¿Por qué llamarle El
Verbo a Jesucristo?
La razón nuevamente tiene que ver con la forma de
pensamiento de los hebreos, ellos consideraban las palabras como algo poderoso
en sí mismo (no al estilo de declarar o atar y desatar que hoy se da), sino aún
mucho más profundo, y conciso.
Ellos consideraban a las palabras más que un simple
sonido saliendo de nuestras bocas, ellos tenían la idea de que las palabras
expresaban la mente o el alma de quien las decía, por ellos es que Esaú lloraba
amargamente al ser dada su bendición de primogénito a Jacob y es la razón por
la cual los patriarcas y reyes de Israel pronunciaban sus últimas palabras y
bendiciones antes de morir.
·
Isaac
con Jacob. Génesis 27:18-40.
·
Jacob
a los patriarcas. Génesis 49.
·
Moisés
al pueblo de Israel. Deuteronomio 33.
·
David
a Salomón. 1ª Reyes 2.
Juan, que también era de nacionalidad, cultura y forma
de pensamiento hebreo sabía esto perfectamente, sabía que, así como nuestras
palabras expresan nuestros pensamientos, así el Verbo expresa el pensamiento de
DIOS mismo, Cristo expresa la esencia de DIOS mismo, en forma más simple de
asimilar: Cristo es la Palabra de DIOS.
Este es el motivo por el cual leer la Biblia es tan
poderoso y maravilloso, no hay otro libro igual, no hay otro que si quiera se
acerque un poco al poder que se desata cuando leemos las Escrituras, poder no
en el sentido mágico o místico, poder en el sentido de TRANSFORMACIÓN DE
NUESTRAS VIDAS.
El Verbo es Cristo, y Cristo es la Palabra de DIOS
Personificada, y la Palabra de DIOS es DIOS mismo, expresándose por medio de
sus pensamientos e ideas los cuales están plasmados en el papel de nuestras
biblias, repito, por eso es que leer la biblia es tan importante, trascendente
y renovador para la vida de los hijos de DIOS, es tener comunión íntima con
DIOS, no es como leer otros libros que solo nos informan, es entrar en los pensamientos
mismos de DIOS para ser transformados a la imagen de CRISTO.
Lamentablemente en la actualidad se les da más auge a
nuestras propias palabras que al Palabra de DIOS, personas que prefieren
declarar, atar, desatar, basados en la falsa idea que sus palabras tiene poder
en sí mismas, y aquella Palabra que, si tiene poder en sí misma, la dejan
arrumbada, llenándose de polvo en un librero o encima de la TV.
La falta de conocimiento de las escrituras no
es nada nuevo en la iglesia de Cristo. 2ª
Pedro 2:1-3.
Sin embargo, hoy en día con tantas copias
disponibles en multitud de formatos de la biblia (PDF, e-book, i-Pad, i-Phone,
celular ANDROID, Tablet, laptop, pc, tradicional, con 2454 idiomas traducidos
de la biblia, EL MUSEO MANA de las Escrituras) estamos en la época en que MAS
IGNORANTES SOMOS DE LA BIBLIA, pues a pesar de tenerla tan disponible
desgraciadamente no la leemos.
Si nos atrevemos a leer cualquier libro de
mártires cristianos (personalmente recomiendo el de Juan Fox) leeremos mucho
más de una HISTORIA VERÍDICA acerca de gente con un amor tan profundo por DIOS
y su PALABRA que no dudaron en dar su vida para preservarla. En cambio, hoy en
día nos da pena traer biblia al servicio, nos excusamos de traerla en el
celular, lo cual no es malo, lo PÉSIMO ES QUE NI AHÍ LA LEEMOS A NO SER EL DÍA
DE SERVICIO.
Por este motivo hoy en día muchos cristianos
andan “arrastrando la cobija”, y por lo mismo predicaciones que hablen de
confesión positiva, prosperidad, positivismo, superación personal, etcétera
están ganando terreno en la iglesia de Cristo.
Estamos en uno de los peores momentos de ignorancia
teológica de la historia, los cristianos no conocen a DIOS porque NO conocen su
Palabra, el Verbo, lamentablemente no es por falta de traducciones o recursos,
sin embargo, con tantos recursos a la mano NO LEEMOS LA BIBLIA DIARIAMENTE.
Por eso es de vital importancia comenzar una vida de
lectura diaria y consistente de la biblia, tener un plan para leerla completa
la menos una vez al año y una vez que comenzamos no parar nunca, si lees la
biblia ocasionalmente y solo por partes aisladas (hoy un libro, mañana en
otros, según la abrimos) no estamos haciendo nada en realidad.
Comienza leyendo el Nuevo Testamento completo, por el
libro de Mateo, al menos 4 o 5
capítulos al día (10 a 15 minutos) y no pares hasta llegar a Apocalipsis 22, después ve a Génesis y de igual forma no te detengas
hasta llegar a Malaquías 4.
Sobre todo, lee la biblia con el enfoque correcto, que es el de la
gracia, es decir BUSCA A CRISTO en ella, ya sabemos que
Cristo es el Verbo, es decir la Palabra misma de DIOS, así que no será difícil
encontrarlo en ella.
Cuando nosotros leemos la biblia con el enfoque de la
gracia, el Espíritu Santo utiliza la Palabra escrita para mostrarnos a Cristo y
crea en nuestro interior un deseo de conocerle más íntimamente.
¿Acaso puede estar toda la mente y pensamientos de un DIOS infinito
contenidos en una recopilación de 66 libros? No, no lo creemos
así, lo que si creemos es que DIOS en su infinita sabiduría nos dio lo
necesario en ese libro llamado LA BIBLIA, y es solo por ese medio que podemos
conocerle y amarle correctamente. Deuteronomio 29:29.
Una vez aclarado porque llamarle el Verbo y lo que
esto significa, prosigamos con nuestro estudio: Juan 1:1-2.
La frase en el versículo 1: y el Verbo era con DIOS (que se
repite en el versículo 2) también se ha traducido y estaba cerca de
DIOS O estaba cara a cara con DIOS, y demuestra la gran comunión que el Padre y
el hijo han tenido desde la eternidad, comunión que, aunque aquí no e se
expresa comparten con el precioso Espíritu santo.
Esto solo nos muestra CUAN GRANDE ES EL AMOR DE DIOS
POR SUS ELEGIDOS, no nos necesitaba para tener sumo gozo, siempre lo ha
tenido en sí mismo, no le hacíamos falta para estar bien, a DIOS sin nosotros
no le falta absolutamente nada, y aun así envió a su Hijo a morir en nuestro
lugar y efectuar nuestra redención, este versículo nos enseña la sublime gracia
de Señor, que a los pecadores más viles salvó.
Este evangelio desde su inicio equipara a Cristo con
la divinidad, describiendo su vida en la eternidad pasada, antes de que el
mundo fuera creado por DIOS, es muy importante comprender esta gran verdad, no
solo que Jesucristo es DIOS MISMO, sino
la pre-existencia en la eternidad pasada, al lado del Padre, en su trono de
gloria, recibiendo alabanzas continuamente y siendo alabado por querubines que
no cesan de decir Santo, Santo, Santo es
el Señor Todopoderoso. Apocalipsis 4:8. Cuanto mejor entendamos esta
verdad, más grande se verá la Encarnación del Verbo y nuestra redención.
muy bueno.
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