Juan, el discípulo amado escribió su evangelio en
medio de fuertes tormentas heréticas que amenazaban la pureza doctrinal de la
iglesia, por un lado, estaban los ebionitas, quienes en su celo por la religión
monoteísta judía negaban la divinidad del Verbo, por el otro lado estaban los
docetistas, cuya influencia de la filosofía griega los hacia negar la humanidad
del Señor Jesús argumentando que si era real entonces hubiese estado
contaminado de maldad.
Es tan solo en el prólogo de su evangelio que el apóstol
Juan refuta en varias ocasiones estas herejías encubiertas, teniendo su clímax
en el versículo 14 con la gloriosa y majestuosa Encarnación del Verbo: la
segunda persona de la Trinidad, DIOS Todopoderoso hecho como una más de sus
criaturas con el propósito de salvarnos.
Pero el apóstol Juan prosigue en su introducción
dándonos enseñanzas de un peso extraordinario, de los versículos 15 al 17, Juan
muestra a Cristo como el dador de gracia
sobre gracia, no solo nos salvó, también vive su vida por medio de la
nuestra, una vida perfecta, una vida en armonía con la ley de DIOS, ley que
otorgó personalmente a Moisés en el monte Sinaí. Éxodo caps. 19 y 20.
Si Moisés recibió la ley directamente de DIOS ¿Cómo es
que Juan dice que nunca nadie le ha visto?
Tenemos que entender que Dios no es material
o corporal (El no posee un cuerpo físico).
A veces, las Escrituras hablan de Dios como
si poseyera un cuerpo físico. Hay referencias a Sus brazos, espalda, aliento,
oídos, ojos, cara, pies, dedos, etc. ¿Cómo podemos explicar estas referencias a
la luz de la verdad que Dios es espíritu? En la teología, estas referencias son
consideradas expresiones antropomórficas [griego: anthrópos = hombre
+ morphé = forma].
En otras palabras, es Dios simplemente
atribuyéndose a Sí mismo las características humanas para comunicar una verdad
acerca de Sí mismo, de una manera que los hombres puedan comprender. Ejemplo:
La Biblia habla de las “alas” de Dios, y de Su pueblo amparándose “bajo la
sombra de sus alas” Ruth 2:12. Salmo 91:4. Sería absurdo interpretar
tales declaraciones literalmente.
Dos implicaciones de esta verdad son:
(1) Dios no está limitado a las
restricciones físicas que son comunes entre los hombres.
(2) Dios no es un Ser visible y por lo tanto
no debe ser degradado con imagines hechas por los hombres.
·
Deuteronomio
4:11-15.
·
Hebreos 11:27.
·
1ª Timoteo 1:17 y
6:15-16.
¿Qué pasa entonces con las citas donde dice
que personajes de la biblia lo han visto?
·
Moisés.
·
Aarón,
Nadab, Abiú, 70 ancianos.
·
Ezequiel.
·
Daniel.
·
Etc.
No entremos en pánico y recordemos siempre
que la biblia no se contradice, de lo contrario no sería la Palabra inerrante e
infalible de DIOS, la razón es sencilla, nadie
ha visto jamás a DIOS en su totalidad, nadie ha visto plenamente todo el ser de
DIOS.
Dios es infinito, eterno, omnipresente y
espiritual. Uno tendría que ser igual para ver la esencia total del Señor.
Además, la palabra que usa Juan para ver, en
el griego es jorao (ὁράω, G3708) y
significa discernir claramente, y la frase es un hebraísmo que significa
experimentar, lo cual solo respalda más lo que acabamos de aclarar: Nadie puede ver por completo, nadie puede
discernir al 100%, nadie nunca ha experimentado plenamente a DIOS.
Y los seres humanos se han esforzado y mucho
por hacerlo, desde tiempos antiguos se han hecho imágenes de fundición, se han
levantado altares en montes y lugares altos, pues de esa forma se sienten más cerca de DIOS, y en la
actualidad los métodos han cambiado pero la idea es la misma: las personas tienen hambre espiritual, pero
en su pecado se sacian en los lugares equivocados. Romanos 1:19-25.
Es aquí donde DIOS, por su gran misericordia
y por su amor eterno e infinito interviene por medio de Jesucristo, el
Unigénito.
¿Por qué a nuestro Señor Jesucristo se le conoce como el Unigénito?
La palabra unigénito en español significa
hijo único (así como primogénito hijo mayor), pero surge una incógnita: acaso
¿No somos nosotros también hijos de DIOS como lo dice Juan 1:11-13?
La palabra que usó Juan fue monogenes
(μονογενής, G3439), y describe más que el único hijo que es ÚNICO
en su esencia o en su género.
Cristo no es el único hijo de DIOS,
sino que es único como Hijo de DIOS, esto tiene al menos dos grandes implicaciones:
· Primero, que nosotros somos hijos de DIOS, pero NO somos dioses, ni
Jehová Jr. ni ninguna otra insanidad espiritual.
El ÚNICO que comparte la divinidad con el
padre es Jesucristo, nosotros NO, ni tenemos poder creativo, ni somos
omniscientes ni tenemos ningún otro atributo incomunicable de DIOS, cuando
leemos 2ª Pedro 1.4 que tenemos
naturaleza divina, se refiere a nuestra nueva vida en cristo, alejada del
pecado y los vicios de la carne.
· Segundo, ligado a la frase que
está en el seno del Padre, expresa tanto su eterna unión con el Padre en
la Deidad y la inexplicable intimidad y amor entre ellos, participando el Hijo
en todos los consejos del Padre y gozando de todos sus afectos.
Ellos, el Padre y el Hijo, no tenían una
relación muy cercana, ni la tienen, eso se queda muy corto, no lo alcanza a
explicar, ellos desde la eternidad y hasta la eternidad han sido UNO solo, en
tan profundo el grado de comunión que es imposible para nosotros como seres
humanos limitados entenderlo por completo.
¿Quién está más cerca de su Padre, no sólo
por su amor hacia él, sino por el vínculo de la naturaleza y por medio de esa
unión o unidad que existe entre ellos, por la cual el Padre y el Hijo son uno?
Por eso es que El verdadero conocimiento de Dios
procede sólo de Jesucristo, pues él le ha dado a conocer: Cristo nos muestra
al Padre, solo en Cristo podemos conocer correctamente a DIOS.
No estamos tratando de monopolizar la
religión como muchos acusan al cristianismo, pero NO es como nosotros digamos,
no hay muchos caminos a DIOS, no es como nosotros sentimos, no es a nuestra
manera, es a la manera de DIOS, como dice DIOS y porque lo dice DIOS en su
Palabra.
Dios había estado escondido bajo las sombras
de la ley, los ritos, las ordenanzas, los días festivos, las ceremonias, las
vestiduras, el templo y el tabernáculo solo eran sombra de lo que había de
venir. Colosenses 1.15. Colosenses
2:16-17.
¿Por qué a DIOS nadie le había experimentado,
discernido, visto por completo?
A causa del pecado, DIOS es un DIOS santo,
santo, santo, en la literatura hebrea no significa tres veces santo, significa infinitamente santo, por nuestra parte,
los seres humanos estábamos intestados de pecado, de inmundicia a los ojos de
DIOS, por este motivo es que realmente nadie había podido estar al cien por
ciento con DIOS, no solo es la limitante física, también la limitante
espiritual.
Pero ya no es más de este modo, como dijimos,
los seres humanos buscamos a DIOS de forma instintiva, hay eternidad en
nuestros corazones y aunque la psicología diga que la religión es el opio de
todos los pueblos, y aunque los ateos digan que ellos no necesitan a DIOS, lo
cierto es que aun en su afán de negarlo es el modo inconsciente de buscarlo.
Solo que era imposible de llegar a Él,
gracias a DIOS por Jesucristo, que es quien nos lleva al Padre, él nos lo
revela, él nos lo da a conocer como realmente es.
Recordando la analogía del ser humano y las
hormigas que usamos en el tema de la Encarnación, imaginemos por un momento que
tratáramos de enseñar a hablar a una colonia de hormigas, que tratara de
enseñarles sumas, restas, historia, etc. ¿Sería eso posible? Por su puesto que
no, están muy limitadas en comparación con nosotros.
Ahora bien, si tomáramos forma de hormiga y
de esa forma conforme a sus capacidades les mostramos las maravillas del ser
humano como raza otra cosa distinta sería.
Nosotros somos esas hormigas, ajenas a la
gloria y majestad de DIOS, pero DIOS que es rico en gracia, amor y
misericordia, envió a su Hijo Unigénito a mostrarnos al Padre, ahora podemos
tener una relación de intimidad y comunión con EL CREADOR Y SUSTENTADOR DEL
UNIVERSO ENTERO.
En Cristo podemos conocer a DIOS, pero Conocer A DIOS No Siempre Será Un
Deseo Emocional, Es Necesario Que Se Transforme En Una Fuerte Convicción.
No es sabio esperar en vivir cada día en un
clímax emocional que se da al ser atraídos por DIOS, algunas veces
atravesaremos valles de frustración, desilusión, confusión, dudas, pecados,
experimentaremos alti bajos, veremos varias veces tanto la FE como la carne
estar en su punto más fuerte.
Todo esto es con el propósito de que
conozcamos a DIOS más íntimamente. Si solo conocemos a DIOS en las buenas, ¿en realidad puedo decir que
lo conozco? Job 42:1-7.
DIOS rara o ninguna vez se muestra así mismo
a los cristianos superficiales o de
ocasión, pero está más que dispuesto a hacerlo a los que tienen un hambre genuina de Él. Nuestra oración más ardiente debería
de ser: Señor, haz lo que sea necesario
para que tenga hambre y sed solo de ti.
Hoy sabemos exactamente a qué se refería el
apóstol Juan cuando escribió: A Dios
nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha
dado a conocer.
1.
El pecado limitaba al ser humanos a tener una
experiencia plena con el Creador.
2.
El Hijo, por ser igual al Padre, por ser uno
con él, es quien podemos encontrar a DIOS y por fin tener una vida de paz
espiritual.