En la clase pasada entendimos que la redención y la
expiación, a pesar de estar íntimamente relacionadas con la salvación, en
esencia son dos conceptos diferentes entre sí, de forma sencilla concluimos que
la redención es el acto de comprar mientras que la expiación es la moneda de
pago.
Redención: Cristo nos compró del mercado de esclavos del pecado
y del maligno.
Expiación: La moneda con que pagó: su sangre, su vida, su sacrificio.
Basados en la cita de Filipenses 2:8 entendimos que la expiación cuenta con dos elementos
inseparables entre sí:
Elemento Subjetivo: se
humilló así mismo haciéndose obediente.
Elemento objetivo: hasta
la muerte y muerte de Cruz.
Solo si llegamos a un buen equilibrio entre ambos
elementos tendremos una Cristología sana, hay lamentablemente teorías
expiatorias que se van desmedidamente del lado del elemento objetivo y caen no
solo en errores graves, algunas hasta en serias herejías:
1.
Teoría
de la recapitulación en Cristo.
2.
Teoría
del rescate pagado a satanás.
3.
Teoría
de Anselmo acerca de la satisfacción. (La teoría comercial).
4.
Teoría
rectoral o gubernamental.
5.
Teoría
del arrepentimiento vicario.
Pasemos ahora a exponer y analizar las teorías que oscilan
erróneamente hacia el elemento subjetivo de la obra sacrificial de Cristo.
1.
Teoría
de la ejemplaridad.
Esta teoría fue sostenida al menos implícitamente por
Pelagio, y fue expuesta a detalle por Fausto Socino, padre de los unitaristas
modernos y algos teólogos liberales, según esta teoría la única barrera entre
el hombre y DIOS es la pecaminosidad subjetiva del ser humano y la única
solución es mejorar la condición moral del hombre, lo cual se logra simplemente
con el arrepentimiento y la firme convicción de cambiar de conducta ética.
De esta forma la expiación queda a cargo del libre albedrío del ser humano, por si
fuera poco, Socino negaba la divinidad de Jesucristo pues solo era un noble mártir que murió por una noble causa, y
el poder de la redención radica en el buen ejemplo de fidelidad a la verdad y
de obediencia que nos dejó para motivarnos a vivir como él.
Esta teoría va en contra de varios dogmas establecidos
en la Palabra de DIOS:
·
Niega la depravación total. Efesios 2:3.
·
Niega la divinidad de Cristo. Juan 1:1. Hebreos 1:1-3.
·
Contradice el valor sustitutivo del sacrificio de
Cristo. 2ª Corintios 5:21.
· Limita la salvación solo a aquellos que vivimos
después de Cristo, pues solo nosotros vimos o sabemos de su ejemplo en la Cruz.
·
Niega la necesidad del nuevo nacimiento. Juan 3:3-5.
2.
Teoría
de la influencia moral.
Pedro Abelardo en respuesta a la rígida teoría
comercial de Anselmo postulo esta teoría, en la cual según él la expiación de
Cristo es la suprema manifestación del amor de DIOS con el fin de ablandar los
corazones de los hombres y guiarlos al arrepentimiento.
Los que aceptan esta teoría creen que el hombre está
espiritualmente enfermo y en necesidad de ayuda, y que el hombre es inducido a
aceptar el perdón de Dios al ver el amor de Dios para con el hombre. Ellos
creen que el propósito y el significado de la expiación de Cristo eran para
demostrar el amor de Dios para con el hombre. Aunque es cierto que la expiación
de Cristo es el ejemplo supremo del amor de Dios, esta teoría es herética
también porque niega la verdadera condición espiritual del hombre y niega que
Dios realmente exija un pago por el pecado. Esta perspectiva de la expiación de
Cristo deja a la humanidad sin un verdadero sacrificio o un pago por el pecado.
La diferencia principal entre la teoría de la
influencia moral y la teoría del ejemplo es que la teoría de la influencia
moral dice que la muerte de Cristo nos enseña cuánto nos ama Dios y la teoría
del ejemplo dice que la muerte de Cristo nos enseña cómo vivir.
3.
Teoría
de la identificación mística.
Este punto de vista considera la expiación de Cristo
como un triunfo sobre Su propia naturaleza pecaminosa a través del poder del
Espíritu Santo. Los que sostienen este punto de vista creen que el conocimiento
de esto influirá místicamente al hombre y despertará su “conciencia de dios”.
Ellos creen también que la condición espiritual del
hombre no es el resultado del pecado sino simplemente la carencia de esta
“conciencia de dios”.
Claramente esta es una de las más heréticas de todas
estas teorías porque para creer esto, uno tiene que creer que Cristo tuvo una
naturaleza pecaminosa, mientras la Escritura es clara que Jesús era el
Dios-hombre perfecto, sin pecado en todo aspecto de Su naturaleza. Hebreos 4:15.
4.
Teoría
dramática.
Este punto de vista considera la expiación de Cristo
logrando la victoria en un conflicto divino entre el bien y el mal y ganando la
libertad del hombre de su esclavitud a Satanás. El significado de la muerte de
Cristo era garantizar la victoria de Dios sobre Satanás y proveer una manera
para redimir al mundo de la esclavitud del mal.
Basta con darnos cuenta que DIOS y el diablo NO están
en una lucha cósmica por nuestras almas, de ser así, el diablo estaría a la
altura de la majestad divina, lo cual es herético en extremo.
El error de estas teorías es que se van demasiado del
lado subjetivo, es decir solo toman en cuenta la persona de Jesucristo, ya sea
como ejemplo, influencia moral, vencedor del pecado y vencedor del diablo, pero
dejan de lado el elemento objetivo: el
sacrificio vicario en la cruz del calvario.
En la próxima enseñanza veremos la teoría expiatoria
con más apego a la Escritura y por consecuencia es aquella a la cual se ha
apegado la verdadera iglesia de Cristo, la iglesia que es columna y baluarte de
la Verdad.
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