Juan el apóstol, continua su relato de la vida y
ministerio terrenal del Señor Jesús, las primeras palabras del versículo 22 después de esto aparecen en varias
ocasiones en este mismo evangelio y en el griego original indican que no fue
mucho tiempo después, obviamente después de la celebración de la Pascua y la
entrevista nocturna de Jesús con Nicodemo, temas de los cuales ya hablamos
anteriormente.
Lo siguiente que nos relata el evangelio es que Jesús
se dirigió a la tierra de Judea con algunos de sus discípulos, se cree que muy
posiblemente la localidad de Enón junto a Salim no estaba muy lejos de Jericó
lo cual la situaría muy cerca de los vados del río Jordán.
Seguramente estuvo un considerable período de tiempo
en aquellos alrededores o algo así como de mayo a diciembre del año 27.Y
bautizaba. Mientras estuvo allí Jesús bautizaba, no personalmente, sino
a través de sus discípulos (4:2). Este rito, tal como se realizaba aquí, se
puede considerar como una transición entre el bautismo de Juan y el bautismo
cristiano. Tanto en uno como en otro, el agua indica la necesidad de
purificación espiritual, conseguida por la sangre del Cordero de Dios. Sin
embargo, al no bautizar personalmente sino a través de otros, Jesús manifiesta
ser mayor que Juan el Bautista.
La etapa siguiente será el mandamiento de bautizar en
el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Mateo 28:19. Este bautismo, además, se extenderá a todas las
naciones.
Antes de seguir con su relato, el apóstol Juan aclara
que su homónimo Juan el bautista aún no había sido encarcelado por Herodes, con
lo cual nos muestra que entre la tentación de Cristo y el encarcelamiento de
Juan el Bautista hubo un considerable espacio de tiempo durante el cual Juan y
Jesús realizaron un ministerio paralelo.
Ambos, Juan y Jesús por medio de sus discípulos
ministraban el bautismo.
En la mañana entendimos que el bautismo no nos convierte
en parte de la familia de DIOS, eso es por la fe en Cristo, el bautismo es muestra
de que somos parte de esa familia en Cristo. Juan 3:5.
Y antes de continuar, vamos a detenernos para hablar
del bautismo, solo deseo advertir que antes de menospreciar este tema y pensar
en el como algo secundario, recordemos que TODA la Palabra de DIOS es útil y
necesaria para los creyentes, además la predicación es doblemente dirigida,
primero a aquellos que aún no se han bautizado, mostrarles lo que en verdad
significa este sacramento, y segundo es para aquellos que ya son bautizados, en
realidad vivimos como tales o
¿Solo somos unos
paganos remojados más?
Durante la época de la reforma protestante del siglo
16, se retomaron bíblicamente los dos únicos sacramentos establecidos
bíblicamente: la santa cena o cena del Señor y el bautismo, la iglesia católica
romana en sus desvíos había corrompido estas prácticas además de agregar otros sacramentos
más que no son mencionados en la Escritura.
Con el estallido de la reforma y con la llegada de las
confesiones de Fe se les da el estatus de importancia y el real sentido que
estos sacramentos tienen, sin embargo, en nuestra época nuevamente, sobre todo
aquellos que venimos de iglesias culturalmente cristianas nos percatamos que se
ha perdido la relevancia que tienen.
La cena del Señor es casi un evento pasado por alto en
muchas iglesias, solo lo llegan a celebrar ocasionalmente y de forma totalmente
anti bíblica, llegando al extremo de decir que daría igual si se toma coca cola
con papas fritas, que no pasa nada malo de ser así.
De la misma forma ha pasado con el sacramento del
bautismo, ahora solo son números de los cuales se pueda presumir en las juntas
de pastores, mientras más personas metas al agua y les digas que ya son
bautizados mejor, así tienes más de que presumir ante los demás pastores.
Si leemos libros de historia de la primera iglesia,
nos daremos cuenta que antes de poder bautizar a aun creyente primero lo
discipulaban alrededor de 2 años y solo si mostraba rasgos de ser un verdadero
creyente, fiel al Señor, de comportamiento y testimonio leal a las Escrituras
entonces era bautizado.
Esto se dio así por las múltiples persecuciones que
sufría la iglesia, que para evitar ser echados a las fieras o crucificados a
las afueras de Roma, preferían negar la Fe en Jesucristo, aun a pesar de ya ser bautizados, por este motivo la iglesia
estableció el catecismo que es el latín de discipulado.
Muchos son los que alegan que el eunuco etíope bajó a
las aguas sin antes ser discipulado, lo que ignoran quienes así piensan es que
los libros históricos como el libro de los Hechos
NO son para hacer doctrina de ellos, son el apoyo de la doctrina y una cosa
es el Historia Salutis y otra muy
distinta es el Ordus Salutis.
¿Por qué se les llama sacramentos?
Viene de la palabra latina sacramentum que es como se tradujo la palabra griega misteryon, pues en realidad es un
misterio que no alcanzamos a comprender por completo con la razón por lo tanto
es necesaria la FE para entender cómo es que el Señor por medio de actos
simbólicos edifica y sostiene a su iglesia.
Bíblicamente hablando solo son dos los sacramentos que
se ordenan a los creyentes:
·
El
bautizo.
·
La
cena del Señor.
La palabra “bautismo” de donde
toma su nombre Juan el Bautista viene
del gr. Baptisma que significa
literalmente proceso de inmersión o sumergir (de Bapto: mojar o empapar) se les
sumerge totalmente en el agua (alberca, rio, pila, etc.) no solo por la
etimología de la palabra, sino siguiendo el ejemplo del bautizo de Jesús.
El bautizo,
es una manifestación externa de algo que sucedió internamente en los creyentes,
es decir, la plena identificación con Cristo en su muerte y resurrección.
Algo que en la iglesia hemos olvidado es que el bautismo no es una
oferta que hacemos los hombres, no somos la iglesia los que invitamos a los discípulos a ser
bautizados, el bautismo es un ofrecimiento de parte de Cristo mismo y aquellos
que lo han despreciado han despreciado y desobedecido al mismo Señor que los
salvó de sus pecados. Mateo 28.19-20. Marcos
16:15-16.
El bautismo lo encontramos tipificado desde el A.T. primero en la
circuncisión de los varones descendientes de Abraham, a los 8 días de nacidos,
pero también cuando el pueblo de Israel fue sacado de la esclavitud en Egipto y
pasaron bajo la nube de la Gloria. 1ª Corintios 10:1-2.
El bautismo
es la forma práctica en que DIOS dice SON DE MI PROPIEDAD.
Lo hizo con Israel al sacarlos de Egipto, todas las naciones escucharon
hablar del pueblo que DIOS liberó de forma milagrosa y espectacular y el temor
del Señor cayó sobre esos pueblos, sabían que El DIOS Eterno tenía un pueblo
propio, al igual pasaba con la circuncisión, era una muestra clara y externa de
ser diferente, de pertenecer a un pueblo diferente, de ser parte de un pacto
diferente y de tener como dueño al DIOS TODOPODEROSO.
Con el bautismo no es la excepción, por eso se hace de forma PÚBLICA,
por eso la congregación nos acompaña no solo son los pastores y los que se van
a bautizar, si invitamos a la más gente posible no es porque estemos organizando una excursión a nadar es
porque el bautizado le está gritando al mundo soy propiedad exclusiva de DIOS.
Tal vez es por este motivo que no pocos son los que no dan el paso de fe
y obediencia, saben que es mucho
compromiso, pero ya lo entendimos la semana pasada, una entrega mediocre da
como resultado un cristianismo mediocre, o nos rendimos por completo o no hemos
rendido nada a los pies de Cristo.
Pero antes de pensar menos de nuestros hermanos que han pospuesto el
bajar a las aguas, pensemos brevemente en nuestras vidas, ¿En realidad vivimos
como propiedad exclusiva de DIOS? O
¿Solo remojamos nuestros pecados en el agua?
Quien ha sido bautizado no pertenece ya al mundo, no le sirve, no le
está sometido. Únicamente pertenece a Cristo y su comportamiento frente al
mundo sólo está determinado por el Señor. Santiago
4:4.
¿Cómo salir del mundo si vivimos en él? Muchos se han preguntado esto, a
lo cual es bueno saber que entendemos por el
mundo, ciertamente no se refiere al planeta tierra y su población, por este
tipo de malas interpretaciones es que se dieron los llamados grupos monásticos.
Juan 17:15-16.
Cuando la
biblia se refiere en este aspecto al MUNDO de salir o separarnos de EL MUNDO
hace referencia a no participar de los actos pecaminosos o carnales de una
sociedad apartada del temor de DIOS.
Solo basta con responder una sencilla pregunta para saber si estás
haciendo algo del mundo que desagrada
a DIOS, y es ¿Cómo glorifico a Jesucristo haciendo esto?
·
Corrupción.
·
Malas palabras.
·
Vicios desenfrenados: alcohol, cigarro, drogas, etc.
·
Bailes mundanos sensuales.
·
Albures.
·
Todo tipo de perversiones o desviaciones sexuales.
o
Fornicación.
o
Adulterio.
o
Homosexualidad.
o
Etc.
·
Acoso escolar.
·
Maltrato de todo tipo.
o
A nuestros semejantes.
o
A la creación.
·
Etc.
Por eso es que, en el bautismo, el hombre muere con su viejo mundo, con
sus pasiones y deseos carnales y ahora renace para vivir En Cristo. Colosenses 3:1-8.
Cuando Jesús llamaba a alguno al seguimiento, exigía un acto visible de
obediencia. Seguir a Jesús constituía un asunto público. Lo mismo le ocurre al
bautismo, que también es un acontecimiento público. Por él se entra en la
Iglesia visible de Jesucristo.
No son pocos los grupos, tribus, sociedades que han imitado este rito a
su propio modo:
·
En el valle de Anáhuac (nombre dado a México antes de la invasión de
Hernán Cortés), un niño no se hacía hombre hasta que capturaba un enemigo en la
guerra.
·
Los aborígenes australianos mandan a sus niños a vagar
durante seis meses por el desierto. No pueden recibir ayuda de nadie, y si
regresan después del periodo establecido son considerados hombres.
·
Un rito común en algunas partes del mundo es la fiesta de quince años.
Con esta celebración se deja atrás la infancia abriendo las puertas a la
adolescencia.
Con el bautismo es igual, es la forma de hacer pública nuestra profesión
de fe, es decir a todos los que nos conocen: creo y amo a Jesucristo porque él
me amó a mi primero y dejó el mundo y sus deleites carnales para participar de
la comunión con otros creyentes en una iglesia visible.
Una persona que se bautizó pero que No se congrega fiel y regularmente
bíblicamente NO es discípulo. 1ª
Corintios 12:13. Gálatas 3:27. La palabra revestidos se traduce también
como incorporados A Cristo.
Pertenecer a la iglesia visible de Cristo es otro tema que trataremos aparte,
por ahora nos baste con responder a dos preguntas:
¿Qué nos
estorba para ser bautizados? En la congregación impartimos clases de discipulado bíblico, clases
doctrinales y predicación expositiva para ser catecúmenos.
¿Vivimos
como discípulos que se han bautizado o como paganos remojados? El
arrepentimiento e ir a los pies de cristo y descansar el Él son la base de una
vida verdaderamente a la altura de alguien que ES PROPIEDAD DE CRISTO.
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