Soteriología. Tema 17: La Regeneración Espiritual Parte II. Cita: Juan 1:13.

La clase pasada empezamos a estudiar el concepto de la regeneración espiritual, entendimos que lo que nosotros percibimos como la conversión, darle la espalda al pecado para seguir a Jesucristo, tuvo su origen en DIOS, desde la perspectiva divina la conversión es precedida por la regeneración, esto es así porque de nosotros NO puede salir nada bueno, mucho menos el abandonar el pecado para seguir al DIOS vivo.

Concluimos, además que No podemos decir que somos regenerados si no hemos nacido de nuevo, y se nota que hemos nacido de nuevo por que vivimos como regenerados, es decir le damos la espalda al pecado y la cara a DIOS, esto por medio de Cristo en nosotros.

El día de hoy veremos las características, así como la causa eficiente de la regeneración.

A.   Características de la regeneración espiritual.

          1.          Es instantánea. La implantación de la nueva vida siempre es de forma instantánea, tanto en el terreno natural como en el espiritual, nunca se ha escuchado de una mujer que este casi embarazada, por ejemplo.

Lo mismo pasa en el ámbito espiritual, es cierto que la providencia de DIOS y el Espíritu Santo preparan el corazón de los elegidos gradualmente, poco a poco somos atraídos a Cristo, pero hay un instante en el cual la disposición de nuestro corazón cambia por completo, de ser hostil hacia DIOS a ser receptivo al amor incondicional.

Y aunque pueden anteceder a la regeneración muchos sentimientos y acciones tales como temor, reflexionar. Asistir a los cultos, orar, etc. Y pueden ser parte del trabajo del Espíritu Santo en nosotros, pero estos no debemos de confundirlos con la regeneración en sí misma.

         2.         Es radical. En el sentido de que es un cambio total en el estado del ser humano, nuestra área moral, intelectual y espiritual se ven afectadas por esta nueva vida.

Empezamos a ver las cosas bajo un nuevo lente, nuestros criterios anteriores se ven sustituidos por el criterio final de la Palabra de DIOS, en los asuntos mortales, intelectuales y espirituales, además que tenemos una nueva motivación interna: Cristo en nosotros. Se puede decir que un regenerado tiene una nueva y correcta forma de pensar, sentir, decidir y actuar.

Podemos darnos cuenta que la regeneración es absolutamente necesaria, pues si bastara con cambiar un poco no habría motivo por el cual DIOS tendría que regenerarnos para ser salvos. Juan 3.3-5. Romanos 8:7. 1ª Corintios 2.14.

Es por eso que antes de la conversión somos muertos espirituales, y a un muerto no le sirven tratamientos médicos, medicinas o inyecciones, a un muerto hay que infundirle una nueva vida, por eso es que Jesús no le dio un nuevo conjunto de reglas o reforzó las ya dadas cuando Nicodemo se entrevistó con Él, Jesús le dijo es necesarios nacer de nuevo.

Es una obra radical también porque implica que el cambio es hecho desde la raíz, en lo más profundo del ser, lo que la biblia llama el corazón, pero debemos de tener cuidado y no confundirnos, este cambio radical NO implica que somos inmunes a los errores y a los pecados, pero si significa que si caemos tenemos la capacidad en Cristo de arrepentirnos. 1ª Juan 3:8-9.

Es paradójico, hay no regenerados que muchas veces actúan como si lo fueran, aunque eso no significa que son salvos y hay algunos regenerados que actúan como si no lo fueran y eso no significa que son perdidos, por algo todo en la salvación descansa en Cristo.

         3.          Se produce primeramente en el corazón. Es decir, en aquella región del hombre donde se forjan las decisiones y de donde sale nuestra conducta. Mateo 15:18-19. Marcos 7.21-22. Lucas 6.45. Romanos 10.9-10.

Es por este motivo que todo el resto de nuestro ser, intelecto, moral, etc. Se ve profundamente impactado.

         4.         No es un cambio físico sino espiritual. La teología católico romana tradicional enseñaba que el justificado obtenía participación de la naturaleza divina mediante la gracia santificante lo cual cambiaba también su estado físico para vivir en santidad moral, en la actualidad muchos grupos carismáticos pentecostales han llevado esta doctrina al punto de la herejía al decir que al nacer de nuevo nos convertimos en pequeños dioses o jehová jr.

Nosotros creemos que el cambio físico tendrá lugar, pero hasta la glorificación, aunque eso no significa que la regeneración es imparcial o incompleta, pues el Espíritu Santo que habita en nosotros asegura su obra. Romanos 8.14.

Estamos además convencidos que cuando el apóstol pedro escribió en su segunda carta que llegamos a ser participantes de la naturaleza divina, por el contexto se está refiriendo a la participación moral en el modo divino de comportarnos huyendo de los pecados y buscando la santidad. 2ª Pedro 1.4.

Por lo tanto, la regeneración no cambia físicamente a los seres humanos, sino espiritualmente, pues antes de ser regenerados, los hombres tenemos conocimiento del pecado, pero no el poder para contrarrestarlo, ahora, regenerados, Cristo en nosotros puede y lo vencerá las veces que sea necesario.

B.   La causa eficiente de la regeneración espiritual.

El apóstol Juan deja bien claro que aquellos que hemos recibido la dignidad y el honor de ser hechos hijos de DIOS, no ha sido engendrado de sangre, ni por voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de DIOS. Juan 1:13.

Significa que DIOS y solo DIOS es quien origina la regeneración espiritual del ser humano y esto tiene varias implicaciones:

1)    La regeneración NO se hereda. Aunque el pecado original si se transmite o herede de padres a hijos de generación en generación sin interrupción alguna, pero la regeneración espiritual, no sigue la misma línea.

Muchas veces hemos escuchado la frase: DIOS tiene hijos, no nietos espirituales, y es totalmente cierta, no somos salvos por tener padres cristianos, que a DIOS le plazca salvar familias enteras no hace una regla que la salvación es heredada.

2)    La regeneración NO es producto de la voluntad carnal. No solo se refiere a que sexualmente es imposible engendrar hijos regenerados, sino que NO hay ningún hombre que este en el nivel carnal necesario que pueda producir hijos regenerados.

Ni la cultura, ni el progreso, ni los avances sociales, científicos o tecnológicos, pueden mejorar espiritualmente a los hombres al grado de hacer posible que produzcan hijos regenerados, ni siquiera la religión es capaz de hacerlo, podemos ser personas profundamente religiosas sin haber nacido de nuevo. Santiago 2:19.

3)    La regeneración NO es producto del esfuerzo humano. La voluntad humana no puede producir algo que está totalmente fuera de su alcance, que rebasa completamente sus posibilidades reales, de la misma forma que un muerto no puede darse vida así mismo.

Por eso es que ni el esfuerzo, ni el mérito ni mucho menos la colaboración de nuestra voluntad con la voluntad de DIOS puede producir ni total ni parcialmente la regeneración espiritual, aunque el pelagianismo y el arminianismo clásico se opongan a esta verdad. Juan 8:32. 2ª Corintios 3.17.

4)    La causa única de la regeneración espiritual es EL ESPÍRITU SANTO. Juan 3:4-6. Solo el Espíritu de DIOS es capaz de infundir vida espiritual en nuestro ser interior.

Como la creación de la nada no condicionó al Señor en su obra magnifica, también el que no haya materia prima con la cual trabajar en nosotros, es decir NO HAY NADA BUENO EN EL SER HUMANO NO LE LIMITA, esto quiere decir que aun así, el Espíritu Santo sopla donde Él quiere, con total libertad y entrando en lo más íntimo de nuestro corazón, y se instala no sobre sino dentro de nosotros de modo que puede cambiarnos desde adentro y llevarnos hacia la vida eterna sin ejercer violencia alguna a nuestro ser interno. Oseas 11:1-4. 1ª Corintios 2.16.

Pero no debemos de olvidar que el Espíritu utiliza un instrumento para ese cambio de mente y voluntad: La Palabra del Evangelio de la gracia de DIOS. Romanos 10.17. 2ª Tesalonicenses 2:13-14. Santiago 1:18-21. 1ª Pedro 1:23-25.