La
semana pasada comenzamos a estudiar este pasaje de la Escritura, ya entendimos
que el enojo, la ira santa de Jesús estaba totalmente justificada y por lo
tanto su reacción fue aceptable, pues no solo se dedicaban a lucrar con sus
compatriotas, lo hacían en una de las fechas más espaciales del año y en el
lugar más sagrado hasta entonces.
Pero,
no solo del templo de la Jerusalén del primer siglo se ha hecho mercado, en el
siglo XVI fue precisamente por este tipo de situaciones que estallo la reforma
protestante, la venta de indulgencias, el simonismo, los abusos del clero, etc.
En
nuestra época no hemos escapado de hacer de la casa de DIOS casa de mercado,
con los timos de empresas pseudocristianas como enlace y los emporios en los
que se han convertido numerosos ministerios. Lamentablemente también aquellos
que estamos por la gracia del Señor en la sana doctrina muchas veces tratamos
el templo cual mercado.
En
día de hoy terminaremos de escudriñar la enseñanza que Juan dejó plasmada en su
evangelio, pues una vez que Jesús purifica el templo es confrontado por los
dirigentes religiosos de la época.
Las
hostiles autoridades judías, posiblemente guardias, escribas, fariseos y
sacerdotes, todos reunidos a causa de la celebración de la pascua, le exigen a
Jesús les explique el motivo de su drástica decisión de echar fuera a los
cambistas y mercaderes, sin embargo, no era porque realmente les interesara el
templo, por el contrario, era una necedad pedir explicaciones, la purificación
es la señal en sí misma, y además fue el cumplimiento de la Escritura en Malaquías 3:1-3.
Aquella
petición de una señal no era sólo necia; era también perversa. Provenía de su
mala disposición para admitir su culpabilidad pues estaban coludidos en las
estafas realizadas. Las autoridades debían estar avergonzadas de todo aquel
robo y codicia en el patio del templo. En lugar de preguntar a Jesús por qué
purificaba el templo, debían haber confesado sus pecados y agradecérselo.
Tengamos
cuidado de caer en la misma actitud al ser confrontados con la Palabra de DIOS
o cuando en definitiva somos amonestados personalmente, a la carne le molesta
ser corregida, es por eso que la biblia marca hombres fieles e idóneos o enseñables y
corregibles como aquellos que han de ser discípulos, pues no cualquiera
es capaz de recibir la corrección de la forma correcta.
Tal
vez hemos escuchado decir alguna vez que a nadie le gusta se confrontado y
corregido, personalmente como pastor muchas veces lo he tenido que hacer ya sea
desde el pulpito o en persona y muchas veces he recibido caras largas,
molestia, incomodidad de parte de las ovejas, pero si algo hemos entendido es
que palabras suaves hacen corazones
duros y palabras fuertes hacen corazones suaves.
Si
te molestaste por la amonestación y corrección de la semana pasada, me da gozo
saberlo y ruego a DIOS que sea para edificación y bendición a tu vida, pero por
favor no tomes la actitud de los líderes de los judíos, que cayeron en la
necedad de exigir una señal para corroborar su autenticidad. Proverbios 9.8.
Esta
actitud de los principales sacerdotes y de los escribas muestra que su corazón
estaba más duro y rebelde que el de los cambistas y vendedores, quienes habían
salido de allí sin protestar. Los responsables del respeto al templo tienen tan
poca vergüenza que reprochan a Jesús algo que ellos mismos deberían haber hecho
a su tiempo. En lugar de confesar su culpabilidad por permitir todo aquello,
piden a Jesús pruebas de su autoridad.
La
respuesta que les da Jesús deja ver su gran sabiduría: Destruid este templo, y en tres días lo levantaré.
Jesús
no estaba cayendo en su juego, por el contrario, lo que él les contesto se
conoce en la cultura hebrea como un mashal
que es una especie de proverbio paradójico, es decir aparentemente
contradictorio y del cual se podía sacar una o varias aplicaciones prácticas, vemos
en la Escritura que este tipo de dichos eran muy usados por Jesús:
·
El que
pierda su vida la hallará.
·
Los
ricos en verdad son los pobres en espíritu.
·
Los
humildes serán exaltados y los que se exaltan serán humillados.
·
Los esclavos
de Cristo son los verdaderamente libres.
·
Etc.
¿Qué
significa este mashal de Jesús? El versículo 21 nos da la clara lección, Jesús
se refería a su muerte y resurrección literal de entre los muertos, por esto es
que cuando resucitó sus discípulos recordaron este acontecimiento y creyeron a
la Escritura por lo que Jesús había dicho.
No
es de extrañarnos el que la predicación de la resurrección de Cristo ocupe un
lugar preferencial en la primera iglesia, ellos no hacían campañas de sanidad y
milagros, no iban prometiendo una vida mejor, no hablaban de otra cosa que no
fuera de Cristo crucificado y resucitado.
·
Aspecto
histórico.
·
Aspecto
apologético.
·
Aspecto
salvífico.
·
Aspecto
evangelistico.
En
todos los sermones evangelisticos del libro de Los Hechos encontramos la
resurrección de Cristo como tema central, como en nuestro tiempo, no siempre es
bien recibida y muchas veces es ridiculizada, pero de algo podemos estar
seguros y es que nadie ha podido refutar ciertísimamente que Cristo resucito. Hechos 17.30-34.
Si vamos a predicar el evangelio que sea completo, la
muerte y resurrección de Cristo, murió en nuestro lugar y ahora vive por
nosotros la vida cristiana.
Es
obvio que los dirigentes religiosos no habían entendido el mashal, ellos de
inmediato lo tomaron literalmente, según el historiador Flavio Josefo en su
libro Antigüedades de los judíos Herodes el Grande comenzó a reinar en el año
37 antes de Cristo, y, según Josefo, empezó a construir el templo en el décimo
octavo año de su reinado; es decir, hacia el año 20–19 antes de Cristo.
Por
ello, en la primavera del año 27 de nuestra era los judíos podían decir que
había llevado ya cuarenta y seis años construir su templo. Es interesante tener
en cuenta que esta gran estructura no se terminó hasta … unos pocos años antes
de ser destruida por los romanos.
Estos
dirigentes judíos veían solo el tiempo de forma literal, si en realidad
hubieran estudiado la Escritura con un corazón humilde ante DIOS se hubiesen
dado cuenta que el templo y todos sus accesorios y ceremonias eran solo una
representación simbólica y que estaban destinados a ser destruidos. Jeremías 3:16. Hebreos 8:13.
Tenían
el corazón velado, entenebrecido a causa del pecado, malinterpretando el
significado del templo. Mateo 23:16.
Lo
de ellos era solo una falsa indignación, pues si realmente les importará el
templo ¡no hubieran cometido estafas dentro de él! Se estaban aprovechando de
la Fe de las personas, en la época de Jesús el templo tenía un significado para
los judíos muy relevante, era símbolo no solo de su religión sino también de su
identidad como nación.
Como
ya lo hemos estudiado en otras ocasiones, en esa época el imperio romano
sofocaba cruelmente a los judíos, muchos desesperados desertaban de su religión
al no tener respuesta de parte de DIOS y enviar al mesías prometido a aniquilar
a los romanos y levantar nuevamente su nación como potencia, es en medio de
esta situación que unos 150 años antes de Cristo se escribió el libro extra
canónico de los Macabeos.
Los
judíos fieles a la religión y a la ley mosaica, tenían tres grandes símbolos:
·
Guardar el día de reposo celosamente.
·
La ley o Toráh (los libros o rollos físicos).
·
El templo.
Herodes
no comenzó a reconstruir el templo porque fuera muy celosos o ferviente de su
religión, lo hizo como una estrategia política, para embolsarse a los judíos
ortodoxos y hacer que regresaran los renegados.
De
ahí la respuesta que le dan a Jesús ¿… y
tú en tres días lo levantarás? Estas palabras, como el mismo lenguaje indican,
se pronunciaron en un tono de desprecio: nos ha costado cuarenta y seis años, y
todavía no hemos terminado; ¡y tú crees que lo puedes reedificar en tan sólo
tres días! Ya hablamos anteriormente del menosprecio, solo puedo recordarles
que tengamos cuidado de no caer en este pecado.
Mas él hablaba del templo de su cuerpo. El apóstol Juan añadió estas palabras porque se daba
cuenta de que aun entre los lectores podría haber algunos que no comprendieran
que el templo era un tipo del cuerpo de Cristo.
Hay
muchas semejanzas entre el templo material y el cuerpo de Jesús:
·
Como el
templo, también el cuerpo de Jesús había sido formado bajo la dirección de
Dios.
·
Como el
templo, también era una casa santa.
·
Como el
templo, era la habitación de la gloria de Dios, allí habitaba el Verbo eterno
pues Él es Dios con nosotros, Emmanuel.
·
Los
adoradores judíos miraban hacia el templo cuando se hallaban lejos de él, del
mismo modo, hemos de poner nosotros la vista en Jesús, el autor y consumador de
nuestra fe Hebreos 12:2.
Y
por la gracia de DIOS, nosotros no solo somos sus hijos, también somos parte
del Cuerpo (del Templo) de Cristo. Romanos
12:5. 1ª Corintios 12:27. 1ª Corintios 6:17.
Los creyentes nos hemos vuelto uno con Cristo, y conforme descansamos
en Él, Él se expresará así mismo por medio de nuestro estilo de vida, en otras
palabras, nuestra identidad como hijos de DIOS surge por medio de nuestra
relación con Cristo, si tenemos problemas con ver nuestra verdadera identidad En cristo es
necesario renovar cada día más nuestra mente en la palabra de Dios. Romanos
12.2.
La totalidad de la vida cristiana está
contenida en Jesucristo, no se trata de algo acerca de Cristo, se trata de
Cristo mismo, y el propósito de DIOS es llevar a sus hijos al momento en que
dejen de vivir para sí mismos y que le permitan vivir a Cristo su vida a través
de la suya.
Todos hemos visto, sino en vivo tal vez en televisión, que llega el
momento en que una persona no puede respirar y en el hospital le conectan a un
respirador artificial, este aparato lo que hace es sustituir la función de los
pulmones, literalmente respira por el enfermo.
Lo que no se ve en las películas, es que en el momento en que la persona
despierta y puede respirar por él
mismo muchas veces vienen complicaciones, pues en lugar de relajarse y
descansar dejando que la maquina siga haciendo el trabajo de respirar por él,
lo que intentan hacer es ayudarle a
respirar y la lucha comienza, entrando en incomodidad, pánico y las alarmas
comienzan a sonar, quienes lo han experimentado dicen que es una situación muy
estresante y de temor.
Vivir la vida cristiana es muy parecido a respirar, de hecho, la palabra
espíritu viene del griego pneuma
que se traduce también como aliento y de aquí vienen palabras como
neumonía o neumático.
DIOS no quiere que sea una lucha constante, que nos de temor, cansancio,
pánico y más cosas desagradables, el plan de DIOS es que el Espíritu Santo
fluya de manera normal en nuestras vidas, tan natural como el respirar diario y
cotidiano, pero algunos cristianos están luchando
en contra del respirador esforzándose en hacer las cosas a su modo en vez
de permanecer en Cristo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario