miércoles, 26 de diciembre de 2018

Pneumatología. Tema 29: Divinidad del Espíritu Santo. Cita: Filipenses 1:19.


Al principio de nuestra serie de enseñanzas, concluimos con varias pruebas bíblicas irrefutables, que el Espíritu Santo es una Persona, no una fuerza, no un poder abstracto, que tiene todos los rasgos de la personalidad:

·         Tiene inteligencia. Romanos 8:27, 1ª Corintios 2:10-11.
·         Demuestra sentimientos: Efesios 4:30.
·         Tiene voluntad: 1ª Corintios 12:11 y Hechos 16:6-7.

El realiza las acciones de una persona:

·         Sirve de guía: Juan 16:13.
·         Convence de pecado: Juan 16:8.
·         Hace milagros: Hechos 8:39.
·         Intercede: Romanos 8:26.

Se le atribuye algo que solo se le puede asignar  a una persona:

·         Se le puede obedecer: Hechos 10:19-21.
·         Se le puede mentir: Hechos 5:3.
·         Se le puede resistir: Hechos 7:51.
·         Se le puede blasfemar: Mateo 12:31.
·         Se le puede afrentar: Hebreos 10:29.
·         Se le puede contristar: Efesios 4:30.

El Espíritu no solamente es una persona, sino que es una persona especial, porque Él es Dios. Pruebas de la personalidad no son necesariamente pruebas de la deidad; pero las pruebas de la deidad también son pruebas de Su personalidad. Si Dios es una persona, y si el Espíritu también es Dios, entonces Él también es una persona.

El Espíritu Santo Es Igual A Dios, De La Misma  Sustancia, Igual En Poder Y Gloria Con El Padre  Y El Hijo, Por Lo Tanto El Espíritu Santo  Es Dios.

Este aspecto de la Pneumatología es muy debatido por diferentes iglesias, denominaciones y sectas religiosas, sin embargo como aprendimos hace tiempo, si una verdad se encuentra en la Biblia  entonces  debemos a apegarnos a ella y vivirla.

Son 4 las pruebas irrefutables que demuestran la divinidad del Espíritu Santo:


A. Sus nombres demuestran Su deidad.

Los nombres divinos del Espíritu revelan Su deidad. A Él se le relaciona por nombre con las otras dos personas de la Trinidad dieciséis veces, por ejemplo:

·         Espíritu de Jesucristo: Filipenses 1:19.
·         Espíritu de nuestro DIOS: 1ª Corintios 6:11.

Además, la promesa de nuestro Señor en mandar otro Consolador. Juan 14:16 usa la palabra otro, que significa uno de la misma clase. En otras palabras, si Cristo es Dios, entonces el Espíritu, el otro Consolador de la misma clase, también es Dios.

B. Sus atributos. Son atributos que sólo pertenecen a Dios es decir incomunicables, el Espíritu tiene dichos atributos que demuestran que Él es realmente una persona, pero también posee atributos que solamente los tiene Dios, lo cual, por lo tanto, demuestra que Él es Deidad.

·         Omnisciencia: Isaías 40:13 y  1ª Corintios 2:12.
·         Omnipresencia: Salmo 139:7.
·         Omnipotencia: Job 33:4 y  Salmo 104:30.

Él también es verdad, amor, dador de vida, pero el hombre también puede ser estas cosas en un sentido relativo, así que los atributos comunicables en El Espíritu son un respaldo más de su personalidad.




C. Sus acciones son las que solamente Dios puede hacer:

·         Fue la causa del nacimiento virginal: Lucas 1:35.
·         Inspiro las escrituras: 2ª Pedro 1:21.
·         Estuvo involucrado en la creación: Génesis 1:2.

D. Sus asociaciones con las otras personas de la Divinidad demuestran Su deidad.

1. El Espíritu como Yahveh (Jehová). El Nuevo Testamento identifica al Espíritu de Yahveh del Antiguo Testamento, particularmente cuando cita un pasaje del Antiguo Testamento en el cual Dios habló y lo atribuye al Espíritu

·         Hechos 28:25 con Isaías 6:10.
·         Hebreos 10:15-17 con Jeremías 31: 31-34.

Esta es evidencia fuerte de que los escritores del Nuevo Testamento consideraron que el Espíritu Santo es Dios mismo.

2. El Espíritu y Dios. La blasfemia contra el Espíritu y el mentirle a Él es igual que hacerle estas cosas a Dios. Mateo 12:31. Hechos 5:3–4.

3. Igualdad ontológica. El Espíritu se asocia en un plano de igualdad con el Padre y el Hijo.

·         Mateo 28:19.
·         2ª Corintios 13:14.

En la referencia de Mateo el uso del nombre en singular fortalece la prueba. Podemos corroborar sin temor a equivocarnos que Él Espíritu Santo es una persona y es Dios.

Hay algunas objeciones que se arraigan del hecho de la subordinación del Espíritu al Padre y al Hijo, la cual la llevan al extremo al decir que en realidad fue creado por ellos en un determinado momento de la eternidad pasada pero antes de la creación del mundo, como veremos rápidamente eso es una mentira.

El Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo o del Padre por el Hijo.

A) Explícitamente se dice en Juan 15:26 que el Espíritu Santo procede del lado del (o de parte del) Padre, pero el verbo mismo ekporeuomai (ἐκπορεύομαι, G1607) indica que sale de dentro del Padre. Proceder en ningún momento significa crear o haber sido creado, es más bien enviado desde dentro de.

B) En cambio, no se dice explícitamente que el Espíritu Santo proceda del Hijo, pero podemos entender lo siguiente:

(a) En Juan 15:26, dice Jesús, refiriéndose al Paracletos: el cual yo os enviaré del lado (o “de parte”) del Padre. En Juan 14:26, este envío se atribuye  al Padre. Lo cual muestra:

1) Que el envío lo hacen conjuntamente el Padre y el Hijo. Juan 10:28-30.
2) Que el Hijo no podría enviar el Espíritu Santo si el Espíritu Santo no procediera también de Él, pues tal envío se lleva a cabo desde el interior de Dios. Juan 16:28.

(b) El Espíritu Santo es llamado en el N.T.

·         Espíritu del Señor. Hechos 5:9. 2ª Corintios 3:17.
·         Espíritu de Jesús. Hechos 16:7.
·         Espíritu de Cristo. Romanos 8:9.
·         Espíritu de Su Hijo. Gálatas 4:6.

Todas estas expresiones indican una procedencia, como puede verse volviéndolas del revés –donde no tienen sentido, por ser anti bíblicas–: «Jesús del Espíritu», «Cristo del Espíritu», etc.

Por lo tanto decir que el Espíritu procede del Padre por el Hijo es una referencia a su llegada planeada por El Padre y ejecutada por medio del Hijo, en perfecta obediencia amorosa.

lunes, 24 de diciembre de 2018

El Evangelio De Juan 106: Una comunidad de amigos. Juan 15:12-13.


El capítulo 15 de este evangelio comienza con la narración de la alegoría de la vid verdadera, la cual tiene una enseñanza central doble:

·         La advertencia de muerte
·         La promesa de vida.

Ambas ligadas a la permanencia en Cristo o la no permanencia, para aquellos que no permanecen una advertencia severa es pronunciada en el verso 6, sin embargo, Jesús también da una maravillosa promesa de vida para todos aquellos que permanecen positivamente a su pies, dicha promesa se ve cumplida en 5 características:

·         Oración eficaz (15:7).
·         Llevar mucho fruto (15:8).
·         Amor. (15:9).
·         Obediencia. (15:10).
·         Plenitud de gozo (15:11).

Pero la enseñanza a sus discípulos aún no ha terminado, el Señor continua, ya no tanto en sí con la alegoría de la Vid, sino con sus instrucciones finales, pues no debemos de olvidar que son escasos minutos los que faltan para el arresto, pasión y muerte del Señor.

Lo siguiente que les dice el Señor es: 12 Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. 13 Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.

Jesús pasa ahora al siguiente, amaos los unos a los otros. Sólo cuando permanecemos en Cristo, en sus palabras, en su amor es que podemos amarnos los unos a los otros. Recordemos que solo unos minutos antes, muestras tomaban la última cena, el Señor ya les había dado una instrucción similar, lo cual nos hace darnos cuenta de la gran importancia que tiene este tema. Juan 13:34.

Al escudriñar estos dos versículos nos encontramos con un pensamiento que el Señor tenía presente fuertemente en esos momentos, de hecho es algo que volverá a hacer hincapié una y otra vez, sabiendo que Él está por marcharse físicamente: la vida en comunidad de sus discípulos.




El Señor dejó un ejemplo que esperaba que impactara a los suyos, con el fin de poder repetirlo infinidad de veces a lo largo de la historia de la iglesia cristiana, él mismo lo dijo: que el amor entre ustedes sea el sello de que son mis discípulos. 1ª Juan 3:16.


Hay lamentablemente una falsa percepción que muchos tienen del cristianismo, y es que creen que se pude ser cristiano en solitario, en la antigüedad se aislaban en las montañas o el desierto, lejos de todo, después se dio el movimiento monástico, huyendo de la verdadera vida en comunidad que el Señor planeó desde la eternidad para los suyos.

No es casualidad que todas las parábolas que tienen que ver con la iglesia sean metáforas de comunidad: rebaño de ovejas, campo de trigo, 10 vírgenes, y la que nos da contexto: la Vid, el árbol al cual nosotros como ramas estamos adheridos, no es un árbol de una sola rama o ramas aisladas, es un árbol de muchos pámpanos entretejidos unos con otros, dando frutos unos y otros.

Si no hemos entendido que fuimos hechos para vivir una relación personal con Cristo y al mismo tiempo para vivir una relación de comunidad con nuestros hermanos en la fe, aún estamos inmaduros, o peor aún, estamos siendo egoístas, pensando que se puede centrar la vida cristiana en nuestra persona, cuando es en Cristo y a la manera que Cristo dice.

DIOS es amor, eso todos lo sabemos, y una lección que desea que aprendamos en la tierra es a amar como Él lo hace, cuando lo hacemos estamos siendo semejantes a Él. Pero amar incondicionalmente es imposible para los seres humanos pues va en contra del egocentrismo de la naturaleza carnal.

Es por ese motivo DIOS planeó que viviésemos en comunidad, tanto en casa con nuestra familia, como en la iglesia con nuestros hermanos en la fe,  para aprender a reposar en Cristo, para conocer su amor, disfrutar y descansar en ese maravilloso amor y posteriormente dejar a Cristo expresar ese tipo de amor por medio de nosotros.

Si huimos de la vida en comunidad, de las comidas, del convivir, de la adoración corporativa, del trato continuo y personal con otros cristianos, por el motivo que sea, personalidad, malas experiencias, etc. en realidad estamos huyendo del plan de DIOS para nuestras vidas.

Es completamente necesario e insustituible el pasar tiempo con otros cristianos, que regularmente tengamos comunión unos con otros es indispensable, no podemos aprender a amar a los demás en soledad, es una contradicción, por eso el movimiento monástico es un total fracaso, no podemos encerrarnos en una burbuja solo porque no soportamos a los demás, de hecho, DIOS a propósito pone a nuestro lado a personas imperfectas, irritantes, frustrantes, que provocan lo peor en nosotros, para pulirnos, o tal vez nosotros seamos esa persona para alguien más. Proverbios 27:17.

El gran problema es que muchos tienen muy altas expectativas, creen que la comunidad de los santos llamada iglesia es un lugar lleno de gente perfecta, cuando es todo lo contrario, ya lo hemos mencionado muchas veces, DIOS a propósito la llenó de personas insoportables para pulir nuestro carácter y enseñarnos a amar incondicionalmente. Efesios 4:2. Colosenses 3:13.

Una vez que entendamos esta verdad, será más fácil tener comunión unos con otros, sobre todo recordando que también nosotros somos insoportables, que el orgullo no nos haga pensar lo contrario.

Cuatro de los Diez Mandamientos son acerca de nuestra relación con Dios, mientras que los otros seis son acerca de nuestras relaciones con personas, pero todos los Diez Mandamientos son acerca de las relacionarse. Por este motivo Jesús resumió los mandamientos en el amor. Mateo 22:36-40.

Podemos darnos cuenta de que es lo importante en nuestras vidas por el tiempo que dedicamos a cada cosa, si decimos que DIOS es lo más importante pero solo le dedicamos dos horas el fin de semana, estamos cayendo en una seria contradicción.

Cuanto más tiempo le dedicamos a algo es porque es lo más importante para nosotros. No basta con decir que una relación es importante, es necesario demostrarlo dando nuestro tiempo en ella.

Y esto incluye:

·         En primer lugar nuestro tiempo dedicado a DIOS.
·         En segundo lugar, nuestro tiempo dedicado a nuestra familia, tanto natural como espiritual. 1ª Juan 3:18.

Pero nunca lo olvides, no solo se trata de venir a la iglesia,  se trata de tener comunión con DIOS y  entre hermanos por consecuencia, el tipo de relación que el Señor moldea en este pasaje en especifico con sus discípulos es de amistad.

Lamentablemente muchos aun cristianos no saben lo que es la amistad conforme a la Escritura, se han quedado con el concepto de afuera. Un amigo se piensa en el mundo es el que invita las chelas, o el que se burla de tus desgracias, un amigo se piensa es el que induce a los vicios, o el que te ayuda a que no te descubran poniendo los cuernos  en pocas palabras se ha dado un toque grotesco al concepto de amistad en el mundo.

Otro mal uso del término amigo o amistad es en la redes sociales, gente que manda la solicitud y al ser aceptada se cuenta entre tus amigos, cuando a la gran mayoría ni se les conoce en persona.

Y no solo en estos tiempos también en  la biblia encontramos ejemplos de malos amigos: Jueces 14:20.

Jesús utiliza la palabra griega filos (φίλος, G5384), adjetivo, que denota ser amado, querido, o amistoso, amigo. La amistad es el afecto personal, sin mancha y desinteresado hacia otra persona que nace y se fortalece con el trato diario.

Ese es el tipo de relación que DIOS planeó para nuestra vida en comunidad, una relación que se fortalece con el trato del día a día:

1.   Una relación que  ama desinteresadamente. Proverbios 17:17. En las buenas todos son buenos amigos, cuando hay dinero, eres popular, toda sale bien, pero un verdadero amigo está contigo siempre, en las buenas y en las malas, sin un interés de ningún tipo de por medio, como Ruth con Noemí.

2.   Una relación recíproca. Proverbios 18:24. La amistad no se dice, se demuestra. Hay gente que parece ser tu amigo pero en cuanto das la espalda te apuñala, por una ganancia terrenal venden su amistad, tal como el amigo de Sansón.

3.   Una relación si envidias de ningún tipo. 1ª Samuel 18:4. A pesar de que Jonatán era el heredero al trono, su amistad con David fue más fuerte que todo.

4.   Una relación que sepa perdonar los errores. Proverbios 17:9.  Seguimos en la carne y queramos o no, cometeremos aún muchos errores más, y cuando aprendemos a amar y perdonar a los que cometen esos errores, nos hacemos más como Cristo.

5.   Una relación que se preocupe por el bienestar del otro. 1ª Samuel 20:1-9.  Tal como lo hizo Jonatán con David, arriesgando su propia vida. Piensa bien si tus “amigos” hablan mal de otras personas contigo, ¿Qué no hablaran mal de ti con los demás? La mejor manera en que un amigo te protege es no trayéndote chismes. Debemos de aprender a seleccionar bien a nuestros amigos, una amistad EDIFICA, NO DESTRUYE.

Hoy por hoy la amistad está muy devaluada, en todos lados encontramos gente dos caras, en el trabajo y la escuela con el llamado Bullyng es casi imposible tener amigos de verdad, hasta en la iglesia desgraciadamente sucede más de las veces que desearías que pasara.

La verdadera amistad como la vemos plasmada en la biblia es cada vez más escasa, lo cual me lleva a preguntarte: ¿Eres un buen amigo? La medida de tu amistad es la medida de tu compromiso a vivir en comunidad, para lo cual nos diseñó y nos salvó nuestro Señor Jesucristo.

O ¿Hablas mal de los otros cuando no están?
¿Los traicionas, les das la espalda, si te necesitan no les ayudas?
¿Cuándo tienen dinero estás cerca, cuando no ni los pelas?
¿Buscas un interés en su amistad?

La verdadera amistad la delineó Cristo en el Juan 15.13 poner la vida por los amigos.





Un Dios Santo 11: Contender con Dios Parte 1. Habacuc 1:2-4.

La máxima expresión de la ira y la justicia de Dios se pueden ver en la cruz del calvario, es ahí donde la justicia santa de Dios se hace ...