|
La clase pasada comenzamos a demostrar con
hechos fehacientes la falsedad de dichas afirmaciones:
I.
Jesucristo, el hombre de la
historia.
A.
Historicidad.
B.
Fuentes
cristianas de la historicidad de Jesús.
C.
Fuentes
no bíblicas de la historicidad de Cristo.
Ningún otro líder religioso reconocido, ni
Moisés, Pablo, Buda, Mahoma, Confucio, etc. han proclamado ser DIOS, con la
excepción de Jesucristo. Y no solo eso, sino que ha convencido a la gran
mayoría de los seres humanos de tal afirmación. ¿Cómo podemos estar seguros de
tal afirmación? ¿Cómo sabemos que Cristo es DIOS?
II.
Jesucristo el hijo de DIOS.
A.
Sus
aseveraciones directas de divinidad.
a.
Durante
su juicio. Marcos 14:61-64.
b.
De
sus propios labios.
c.
Aceptó
adoración en calidad de DIOS.
d.
Confirmación
por otros.
B.
Aseveraciones
indirectas de su deidad. Atributos
incomunicables en Su Persona.
C.
Cumplimiento
de las profecías mesiánicas.
Tenemos toda una clase al respecto en nuestro estudio de bibliología.
D.
Sus
milagros.
¿Puede un hombre en el siglo XXI aceptar
como un hecho verídico que Jesucristo alimentó a varios miles de personas con
cinco panes y dos peces? ¿Es razonable aceptar como un hecho literal que Jesús
nació realmente de una virgen sin participación de varón, que literalmente caminó
por las aguas del Mar de Galilea y también que resucitó a varias personas?
Hasta el siglo XV muy pocos rechazaron los milagros,
pero a partir de ese tiempo, y especialmente en los últimos 250 años, los ateos
y librepensadores han rechazado la veracidad de tales episodios. Muchos de
ellos argumentan que no podemos confiar en un libro, La Biblia, que nos dice
que una Asna habló, que alguien convirtió el agua en vino, que hubo personas
que caminaron sobre el agua, etc. así que lo que haremos es responder no solo a
los milagros realizados por Jesús, sino a todos los milagros que en general
encontramos en las Escrituras.
No vamos a dar una explicación completa de cómo
es que ocurrió cada milagro, tampoco apelamos a decir que los milagros al estilo
bíblico son algo cotidiano a nuestro alrededor, nuestro objetivo es demostrar
que la actitud naturalista hacia los milagros contradice el sentido común y
está basada en una lógica defectuosa.
1)
Definición
de milagro. Lo
primero que haremos en dar una definición simple pero clara de lo que se
considera un milagro:
Un milagro es la divina intervención o interrupción del
curso regular del mundo, lo cual produce un hecho inusual pero intencionado, de
otro modo no ocurriría.
Con está definición entendemos las leyes
naturales como la forma normal y regular en que el mundo opera, el milagro es
por lo tanto un hecho inusual, esporádico y especifico del DIOS que trasciende
el universo. Esto no significa que los milagros violan las leyes naturales o
que se opongan a ellas, simplemente tienen una causa que trasciende la
naturaleza.
2)
¿Son
posibles los milagros? Está
es la pregunta básica que debemos responder, porque de no ser posible que
ocurran milagros, entonces hasta aquí termina nuestra defensa.
El filósofo holandés de origen sefardí
Benito Spinoza (1632-1677) desarrolló el siguiente argumento en contra de los
milagros:
·
Los
milagros violan las leyes naturales.
·
Las
leyes naturales son inmutables.
·
Es
imposible que una ley inmutable sea violada.
·
Por
lo tanto, los milagros son imposibles.
El problema con la lógica de Spinoza es su
definición de milagro, basada en la violación de las leyes naturales, lo
que Spinoza no tomó en cuenta es que las leyes naturales no nos dicen lo que va
a suceder, solo describen lo que es más probable que suceda. Las leyes
naturales son probabilidades estadísticas y no hechos inmutables, por lo tanto,
su definición de milagro, la cual es usada por muchos detractores del
cristianismo, queda descartada.
Su definición desde el inicio deja fuera por
completo a DIOS, dando por hecho que no está involucrado en la ecuación,
olvidan que no solamente es necesario que DIOS exista porque es necesario un
creador, sino que es necesario que sustente el universo (argumento cosmológico).
Y como El Ser que está por encima del universo, pues él lo sustenta, no lo
podemos enmarcar dentro de los límites que la naturaleza tiene. El punto es que:
Si DIOS existe, y ya comprobamos que así es por varios argumentos,
entonces los milagros existen.
Si no hay nada más que el universo, entonces
si es imposible que un milagro ocurra, pero si hay algo más que lo que
conocemos, algo más allá de nuestro universo, que no solamente lo creó, sino
que lo sustenta, entonces no podemos descartar que pueda intervenir o
interrumpir en el curso natural de las cosas.
3)
¿Son
creíbles los milagros? Algunas
personas no niegan que existan los milagros, pero se niegan a darles
credibilidad, no porque sea absurdo que ocurran, por el contrario, es por el
hecho de ser increíbles.
El filosofo escoses David Hume (1711-1776)
decía que no podemos creer en los milagros, porque la experiencia o la falta de
ella, sugiere que no pueden ser creídos, sin embargo, ¿Qué sucede con aquellos
que si experimentaron un milagro?
El hecho de que no hayamos experimentado un milagro, no
significa que no suceden y que no podemos creer en ellos.
Que no se repitan muy a menudo, no significa
que no hayan ocurrido milagros y que no sea posible que se repitan algún día
otra vez, el hecho de que la muerte sea para casi todos, pero que escaseen los
relatos de resurrección, no significa que no pueda ocurrir. La forma de pensar
de Hume y de muchos es mirar todas las muertes para decir que las
resurrecciones son imposibles o en el mejor de los casos no creíbles.
La experiencia personal de presenciar un
milagro no lo hace invalido, es como que alguien diga que nadie ha ganado la
lotería por el hecho de no haberla ganado nunca. Un científico no debería tomar
este camino para refutar los milagros, pues si él supiera como va a terminar un
experimento antes de hacerlo solo porque conoce las leyes naturales, no
se tomaría la molestia de realizarlo. Esto nos lleva a la siguiente pregunta:
4)
¿Son
científicos los milagros? No
pocos dudan que haya milagros, porque tienen la equivocada idea de que si se le
permite a DIOS intervenir en los eventos de la naturaleza entonces no podríamos
apegarnos al método científico.
La objeción Patrik Nowell-Smith se resume
como sigue:
·
Solo
lo que tiene capacidad predictiva puede catalogarse como explicación de los
hechos, como las leyes naturales.
·
Un
milagro no puede predecirse.
·
Por
lo tanto, un milagro no puede calificarse como la explicación a los hechos.
Bajo esta forma de pensamiento, solamente
las explicaciones científicas son de utilidad, todas las demás deben de
apegarse a la ciencia o bien quedarse calladas. Lo que olvidan es que hay muchas cosas en el
mundo natural que no puede ser predichas, como los accidentes en automóvil, o
cuando un ladrón entrará a robar una casa. No todos los hechos naturales son
predecibles, los meteorólogos son los más conscientes de ello.
Los milagros ocurren cuando DIOS estima que son
necesarios, si supiéramos todo lo que DIOS sabe, podríamos predecir cuándo DIOS
va a intervenir de la misma forma que los científicos predicen los fenómenos
naturales.
Dios no interviene para jugar o confundirnos, él tiene
propósitos y nos comunica algo detrás de cada milagro.
·
Los
milagros de Moisés lo confirmaron como el libertador de Israel de la esclavitud
en Egipto.
·
El
fuego que cayó del cielo cuándo Elías oró confirmaron la supremacía de DIOS
sobre Baal.
·
Los
milagros que realizó Jesús lo confirmaron como el Hijo de DIOS y el Mesías
profetizado.
·
Los
milagros de los apóstoles los confirmaron como portavoces oficiales del nuevo
pacto.
Esto es importante entenderlo, porque el
método científico no nos dice que demos buscar una causa natural de las cosas,
sino una causa inteligente, por lo tanto, los milagros no se oponen a la
ciencia, pero el tratar de explicarlos solamente por medio de causas naturales
y no como una intervención con propósitos definidos por DIOS es definitivamente
lo que hace que parezcan contrarios al pensamiento científico.
5)
¿Son
históricos los miagros? La
ciencia no es la única disciplina que echan mano los detractores para rechazar
los milagros, también utilizan el método histórico. Antony Flew desarrolla el
argumento de la siguiente manera:
Toda la historia crítica depende de la
validez de dos principios:
·
Los
restos del pasado pueden usarse como evidencia para reconstruir la historio,
pero solo si presuponemos las mismas regularidades básicas de la naturaleza que
tenemos actualmente.
·
El
historiador critico debe de usar su conocimiento actual de lo posible y lo
probable como criterio para conocer el pasado.
·
Creer
en los milagros es contrario a ambos principios, por lo tanto, históricamente
un milagro es imposible que haya ocurrido.
Lo que dicen es que los historiadores deben
de rechazar todos los milagros, y todo el que crea en ellos es ingenuo y
acrítico en su forma de pensar, pero ente argumento no refuta la posibilidad de
que existen los milagros, solo nos dice que son incognoscibles a los métodos de
estudio históricos. Es un argumento parecido a la credibilidad de los milagros,
al igual que Hume, Flew rechaza los milagros porque no son la norma de
los acontecimientos y al no ser normales no puede haber evidencia histórica de
que sucedieron.
Esta forma de pensar nos dice que solamente
lo común y repetitivo puede ser creído históricamente hablando, pero lo que es
único y poco común, como los milagros, no deben de creerse.
El hecho de que no sea común y repetitivo un milagro,
no significa que no suceden y que no podemos creer en ellos.
Además, no hay razón para no examinar y
verificar los eventos milagrosos con el método histórico crítico, los milagros
registrados en la biblia están tan abiertos a la investigación como lo está
todo hecho de la historia antigua.
6)
¿Son
mitológicos los milagros? Como
lo vimos en nuestro estudio de bibliología, lo teólogos liberales han
dejado de creer en los hechos milagrosos de la Escritura de forma literal para
solo decir que son mitos que expresaban la forma en que entendían las cosas.
El teólogo liberal alemán Rudolf Bultmann
(1884-1976) decía que la ciencia moderna había eliminado los milagros, por lo
tanto, el único modo de reconciliar la ciencia con la fe, es reconociendo que
todos los milagros encontrados en la biblia son mitos organizados en torno al
núcleo de la verdad a la que debemos apegarnos. Su argumento se formula así:
·
Los
mitos son más que verdades objetivas, son verdades trascedentes de fe.
·
Lo
que no es objetivo no puede ser parte de un mundo espacio-temporal verificable.
·
Por
lo tanto, los mitos (milagros) de la biblia, no son parte de espacio-temporal verificable.
Este argumento es insostenible, primero, no
se deduce que un evento, por ser más que objetivo y real no pueda ser
histórico, los milagros son posibles por intervención divina fuera de este
mundo, pero no significa que no sucedieron en este mundo.
Segundo, si los milagros no son objetivos ni
verificables, entonces no podemos probar que no sucedieron, pero bajo ese
argumento, tampoco podemos probar que no sucedieron. En pocas palabras, su
argumento no puede probar lo verdadero y lo falso, es solamente una opinión. Según
Bultmann alguien podría llevar a su oficina el cuerpo de Jesús, y aun así
seguiría siendo cristiano, esa es una falsa fe, una fe vacía, la Biblia es
enfática en los hechos. 1ª Corintios 15:17.
Mitificar los milagros para hacer más creíble La
Escritura destruye la historicidad de la fe cristiana además de la autoridad de
la Biblia.
7)
¿Son
determinables los milagros bíblicos? Esto es importante responderlo, porque no
solo en el cristianismo hacemos reclamos de hechos milagrosos como prueba de
autenticidad, también la vara de Moisés para los judíos, la operación del
arcángel Gabriel a corazón abierto de Mahoma para el islam, los gurús que
afirman levitar para el hinduismo, los pequeños milagros diarios de la
nueva era, etc.
¿Cómo saber que es un milagro y que no lo
es? Es necesario que nuestra definición de milagro sea concisa de tal manera
que elimine las declaraciones falsas y aun los hechos extraordinarios de la
vida, como la recuperación de una grave enfermedad, salir bien librada de un
parto, que la economía sea suficiente en condiciones precarias, etc. hechos
cuales no negamos que DIOS providencialmente actué, pero que no entran en la
definición exacta de milagro, porque de ser así, pierde fuerza el propósito de
los milagros.
Un milagro bíblico debe de tener entonces
tres elementos básicos para considerarse tal:
i.
Poder.
El
poder de los milagros proviene por supuesto únicamente del DIOS que trasciende
el universo. Éxodo 15:6-7. Lucas 1:35.
ii.
Señal.
Nos
habla del propósito por el cual son hechos: confirmar el mensaje de DIOS y
también al mensajero. Éxodo 3.12. Juan 2:11.
iii.
Maravilla.
La
naturaleza de los milagros es tal, que inspiran reverencia en aquellos que los
perciben pues son asombrosos. Éxodo 4.21. Juan 4:48.
Dado que DIOS es bueno, los milagros a nivel
moral solo promueven el bien, además:
Teleológicamente los milagros nunca ocurren para
entretener ni nada por el estilo, sino que tienen el claro propósito de
glorificar a DIOS y dirigir a los hombres hacia a Él.
8)
¿Hay
milagros en la actualidad? Hay
quienes dicen que si DIOS hizo los milagros que viene en la biblia, entonces
¿Por qué no los sigue haciendo? Dicen que no los hace, porque no existe, ese no
es un argumento válido.
Creemos que Dios puede obrar milagros
soberanamente, si en su perfecto plan así lo desea puede y usará cualquier
medio a su disposición, sin la necesidad de la intervención humana. Lo que no
creemos es en que DIOS siga utilizando agentes humanos como medio para realizar
sus milagros, no de la misma forma en que utilizó a Moisés, Josué, Elías,
Eliseo, Isaías, Pedro, Juan, Pablo, etc.
¿Porqué? Porque los milagros y las sanidades
eran dones extraordinarios que sirvieron de señales, dados para confirmar la
revelación de DIOS. La mayoría de los milagros bíblicos ocurrieron en tres
periodos de historia bíblica relativamente breves:
·
En
los días de Moisés y Josué. Para confirmar el pentateuco.
·
Durante
los ministerios de Elías y Eliseo. Para confirmar los proféticos.
·
En
el tiempo de Cristo y los apóstoles. Para confirmar el N.T.
Como el canon se ha cerrado, ya no hay necesidad de que
haya otra época de milagros y señales como las ocurridas en los tiempos bíblicos,
esto no es lo mismo que no suceden porque DIOS no existe.
9)
Conclusiones.
Hemos
demostrado que los milagros son posibles, creíbles e históricos, no violan la
ciencia, no son simples mitos, pueden distinguirse de los hechos
extraordinarios y si no se dan con la misma intensidad y frecuencia que la
biblia describe es porque ya no es necesario que así sea.
Parece razonable inferir que, al aceptar la
existencia de un Dios soberano, todopoderoso y que se preocupa por su creación
y sus criaturas, no hay entonces ninguna razón que impida la realización de
milagros, en especifico de los milagros bíblicos.
Pero aún más, como los milagros no solo son posibles,
sino hasta creíbles como hechos históricos, que no van en contra del
pensamiento científico, y como son definidos como la intervención directa de
DIOS, eso significa que:
Todos y cada uno de los milagros que el N.T. nos dice acerca de Jesús, no solo son
verdaderos, también son una prueba irrefutable de su total divinidad.
E.
Su
resurrección. Este
punto lo veremos la próxima clase.
No hay comentarios:
Publicar un comentario