lunes, 31 de julio de 2017

El Evangelio De Juan 34: Gracias Señor Por No Preguntar. Juan 5.1-9.

El día de hoy comenzaremos a escudriñar el quinto capítulo del evangelio que redacto el discípulo amado, el apóstol Juan, dicho evangelio como nos hemos venido cerciorando, es muy diferente en estilo y contenido a los 3 primero evangelios llamados sinópticos, esto es así no porque se contradiga la Escritura, sino al contrario, es el complemento perfecto, algunos relatos exclusivos que hemos estudiado son:

·         El primer milagro de Jesús: convertir el agua en vino.
·         La entrevista nocturna de Jesús con Nicodemo.
·         La entrevista con la mujer samaritana.
·         El segundo milagro de Jesús: la sanidad del hijo del oficial del rey.

Todos estos relatos, como lo estudiamos, terminan en la salvación o el mensaje de salvación de una o más personas, pues Jesús, el profeta por excelencia, a eso vino a la tierra en forma de ser humano, a traernos el evangelio de DIOS.

Otro relato exclusivo del evangelio de Juan, es el que encontramos en los primeros versículos del capítulo 5, para nuestro estudio lo vamos a escudriñar en varias partes, en la primera el día de hoy, entenderemos el actuar de Jesús no solo con el enfermo a la puerta del templo, sino en general con todos los seres humanos.

Lo primero que nos narra el apóstol Juan es: 1 Después de estas cosas había una fiesta de los judíos, y subió Jesús a Jerusalén. Obviamente se refiere a después de haber sanado al hijo del oficial del rey y los demás acontecimientos narrados en el capítulo 4, el punto interesante aquí es que Juan no nos dice exactamente a que fiesta se refiere.

Los judíos iban en peregrinación a Jerusalén de forma ritual obligatoria a solo 3 fiestas: la pascua, el pentecostés y los tabernáculos, como recientemente había pasado la pascua donde Jesús purificó el templo, las opciones se reducen a dos: pentecostés o tabernáculos, lo realmente importante en este versículo no es lo que no dice, sino por qué no lo dice, la respuesta es simple: porque no es relevante.

Aprendamos una rápida pero valiosa lección: donde la biblia calla, nosotros callemos, si la Escritura no se pronuncia en algo nosotros tampoco lo hagamos, no caigamos en mundos pre-adámicos, por ejemplo.

En el siguiente versículo leemos: 2 Y hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos.

No lejos de la puerta de las ovejas, así llamada probablemente porque por ella pasaban muchas ovejas que se llevaban a sacrificar al cercano atrio del templo, había un estanque. Popularmente, a este estanque se lo conoce por el nombre de Betesda (casa de misericordia). Tenía cinco pórticos o porches cubiertas donde podían descansar los enfermos y protegerse de las inclemencias del tiempo.

Esto explica el siguiente versículo: 3 En éstos (pórticos) yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos, que esperaban el movimiento del agua.


Recientemente entendimos que la misión de Jesús es velar por los enfermos no por aquellos que tienen sanidad. Marcos 2:17. A pesar de que no es nuestro tema central del día de hoy, no deja de ser importante recordar lo que vemos en los discipulados, pues renueva nuestra mente y confirma nuestra convicción de ser como Cristo.

Muchos son los que vienen a la congregación ignorando que somos como un hospital espiritual, donde hay de todo: médicos, enfermeras, camilleros, administrativos, pero lo que más abunda en un hospital son los enfermos, y el ignorar esta verdad ha desilusionado a muchos.

El problema es que muchas veces no somos de expectativas realistas, y al llegar a la congregación, pensamos que todos son amorosos, que todos son buenos cristianos, que todos son espirituales, que todos son discípulos fieles y maduros que reflejan a Cristo todo el tiempo, pensamos que todos los asistentes son gente perfecta, sin malas mañas, con excelente carácter, y siempre dispuestos a sufrir por los demás, pero la realidad es otra y cuando abrimos los ojos a ella, es cuando muchos se desaniman y ya no quieren seguir asistiendo a la iglesia.

En la iglesia acude gente real, no ideal, sean como sean son nuestra familia, de hecho, el que sean algunos difíciles de amar nos ayuda a templar nuestro carácter. Efesios 4:2.

Sin embargo, en el relato de Juan 5, son enfermos literales, que padecían desde hace mucho tiempo dolencias y enfermedades tales como ceguera, parálisis, etc. Lo siguiente que leemos es que esperaban el movimiento de las aguas y el versículo 4 nos habla del motivo por el cual esperaban que el agua se moviera.

4 Porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese.

No en todos los manuscritos antiguos aparece el versículo 4, muchos son los que lo omiten y hay mucha controversia acerca de aceptar este pasaje o no, muchos creen que se añadió más tarde para darle explicación a la respuesta del paralitico en el verso 7.

No vamos a meternos en controversia, y vamos a dar por hecho que es parte del texto, pues si lo entendemos bien no contradice ni hace violencia a la Escritura en general, pues no son pocos los pasajes donde nos habla de seres angelicales, de hecho, hay una ciencia bíblica llamada angelología, la cual enseña acerca de estos seres creados obviamente por DIOS y mostrados en muchas partes de la Biblia.

La angelología nos habla de la personalidad, la naturaleza, la jerarquía, atributos, nombres, títulos, su morada, su origen, su trabajo, etc.
No es el momento de adentrarnos profundamente en este estudio, pero si es bueno aclarar algo en cuanto a estos seres antes de continuar y es QUE LE SIRVEN AL HOMBRE EN OBEDIENCIA A DIOS. Hebreos 1:13-14.

Hay muchas sectas que confunden y caen en herejías, nuevamente por la falta de preparación, al no estudiar doctrinas como la angelología, creen por ejemplo que Cristo es el arcángel Miguel que tomó forma humana, cuando ciertamente Cristo es DIOS, o bien conciben a los ángeles como lo que son: mensajeros (el griego angelos significa mensajero) pero reciben mensajes que contradicen la Escritura de “ángeles” que ni aparecen en la biblia, me refiero a Moroni y el evangelio que a Jesús se le olvido darnos la primera vez que vino a la tierra. Gálatas 1:8.

Hay también algunos carismáticos o neo pentecostales que se la pasan dando órdenes a los seres angelicales porque DIOS los puso a nuestro favor, lo cual es parcialmente cierto, si DIOS los ha hecho espíritus ministradores, es decir nos ayudan, pero OBEDECEN AL CREADOR no a otra criatura como lo es el ser humano.

Otra mentira es que nosotros al morir nos convertimos en ángeles en el cielo, es anti bíblico y es una aspiración mediocre, pues en la glorificación no solo recibiremos un cuerpo nuevo semejante al de los ángeles no igual Mateo 22:30 y se refiere a no más hambre, sed, cansancio, enfermedad ni muerte, sino que el Padre nos glorificará juntamente con Cristo. Romanos 8:17.

Este ser angelical que nos narra el capítulo 5 del evangelio de Juan, bajaba a las aguas de vez en cuando a agitarlas y el primero en bajar al estanque era curado milagrosamente de su dolencia, obviamente el ángel no era quien obraba el milagro, era solo el mensajero, era el encargado de llevar la sanidad divina a los hombres, Con este milagro, Dios ofrecía a su pueblo elegido una prueba de Su buena voluntad, e indicaba que aun cuando había estado por largo tiempo sin profetas ni milagros, Él no se había desentendido ni olvidado de ellos; era un indicio del Mesías que había de venir, así que no espere ni ore para que un ángel le traiga ningún tipo de milagro, ore a DIOS y espere en su buena voluntad.

Lo siguiente que nos dice Juan es 5 Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Esto no necesariamente significa que llevará todo ese tiempo en los pórticos o yendo al estanque, pero si nos habla de la gravedad de su enfermedad crónica, por lo que se entiende era un paralitico, tal vez por ser el caso más patético es que Jesús lo eligió para mostrar su Omnipotencia.

Luego leemos en el versículo 6 Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano? A primera instancia pareciera que la pregunta de Jesús es algo indolente o en son de burla, ¿Qué si quería ser sano? ¿Acaso alguien enfermo pierde alguna vez la esperanza de sanar?

La razón es, sin duda, para que tomase conciencia más profunda del miserable estado en que se hallaba, al no poder ayudarse a sí mismo de ninguna manera, y a desear con mayor anhelo su propia curación. También lo hizo para que estuviera más dispuesto para apreciar su curación.

Pero la respuesta del hombre enfermo es mucho más patética que su condición misma. 7 Señor, le respondió el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo.

Parece que la regla en ese estanque era: cada quien vea por su propio bien, característico de la naturaleza pecaminosa, todos aquellos hombres enfermos pensaban solo en ellos, nadie pensaba en el bienestar de los demás, seguramente muchos llegaron a ser curados y supieron de su condición y aun así decidieron meterse primero al estanque.

No nos sorprenda el egocentrismo de las personas, nunca olvidemos que al igual que nosotros antes de ser llamados a los pies de Cristo, el pecado era su único dueño y señor, y el orgullo y el egoísmo su único pensar, si alguien te tiene que pisar para avanzar es casi seguro que pasará, NO así nosotros lo hijos de DIOS, que no pensamos en nosotros mismos, que nos negamos, tomamos nuestra cruz y cuando llega el tiempo de decidir si hacemos la voluntad de DIOS o la nuestra, por mucho que a nuestro ego le duela PREFERIMOS OBEDECER A DIOS, pero no nosotros, sino Cristo en nosotros.

La respuesta es patética, pues lo más esperado por todos era que dijera un rotundo y simple si, Señor, si quiero. Sin embargo, este hombre enfermo lo primero que hace es QUEJARSE de que no hay quien le ayude a entrar al agua.

Jesús no le preguntó ¿Porque no entras al agua? O ¿tienes quién te meta al estanque? Jesús le preguntó ¿Quieres ser sano? Sin embargo, se había acostumbrado tanto a su condición que se llenó de prejuicios que nublaban su entendimiento.

Había perdido toda esperanza de ser sanado:

·         No hay quien me ayude.
·         Yo no puedo solo.
·         Mis piernas no funcionan y otros me ganan a entrar.
·         Solo soy un invalido despreciable.
·         Nunca voy a ser sano.

Eran los pensamientos que asaltaban continuamente a este pobre hombre, pero antes de sentir lástima por él, echemos un vistazo a nuestro propio corazón, pues seguramente no pocas veces hemos estado en una situación o tomado actitudes parecidas a este paralitico.

No necesariamente en alguna enfermedad o condición física, pero si en nuestras vidas espirituales, el desánimo hace presa de nosotros, pone su pie en nuestro cuello y nos tiene contra el suelo matándonos poco a poco:

·         Para que voy a la iglesia si no cambia nada en mi vida.
·         Para que me discípulo si no pasa nada.
·         Nunca voy a poder dejar este hábito pecaminoso (cual sea).
·         Mi vida no cambia, creo que no soy hijo de DIOS.

¿Cuántas veces hemos estados atrapados por alguna situación negativa o algún problema? Y por más que tratamos y nos lo proponemos simplemente no podemos salir de él, cuando nos encontramos en medio de ese tipo de situaciones es casi imposible imaginarnos libres de esa cruel atadura.

Muchas personas creen que aman los pecados que practican en secreto simplemente por el hecho de les da placer momentáneo y no los han podido superar, si en realidad amaran esos hábitos de la carne no se sentirían miserables después de hacerlos y no tratarían de dejarlos con desesperación.

En Romanos 7:16-19, Pablo confiesa que ha llegado a pecar, El hombre que escribió la mayoría de los libros en el Nuevo Testamento, abiertamente admitió que había visto días de grandes luchas con los pecados, lo cual nos muestra otra gran verdad: nunca pensemos que somos los únicos que luchan con pecados personales, que solo nosotros fallamos, que solo nosotros nos comportamos de manera equivocada, esa es una trampa que nos mantendrá atrapados en la desesperación si caemos en ella.

Aun los grandes hombres de DIOS (Ya entendimos que nos los hay, hay un DIOS grande que se glorifica en hombres débiles) pasan por pruebas y desánimos. Santiago 5:17.

Tal vez has llegado a pensar que eres mala persona o que hasta ni has nacido de nuevo solo porque el placer de pecar te arrastra a caer de nuevo, pero esta inclinación a los pecados no eres tú, tú eres nueva criatura y tienes una identidad bien definida: eres Santo. 1ª Pedro 2:9.

La esencia, el ser interior, espiritualmente hablando, los cristianos no somos pecadores, es la presencia de la carne la que nos inclina a pecar. Romanos 7:21-23.

Es un paso vital entender esta verdad, no somos pecadores por pecar, no más, estando en Cristo no podemos volver a ser pecadores en el sentido estricto de la palabra, pues eso implicaría que perdimos nuestra regeneración y eso es imposible.

No caigamos en la mentira de creer que amamos los pecados solo porque nos producen placer y por esa causa volvemos a cometerlos, si bien es cierto que el pecar trae consigo un placer pasajero, eventualmente se vuelven una amargura en la vida de los hijos de DIOS. Romanos 7:24. ¡Miserable de mí! Gritaba Pablo.
El hecho de que lleguemos a disfrutar el placer pasajero que causa el pecar, solo dice algo de nosotros: somos seres humanos todavía.

Si nos duele el no madurar, si nos desanima el no cambiar, ¡gloria a DIOS! QUIERE DECIR QUE EL ESPÍRITU SANTO NOS ESTA REDARGUYENDO, y que es la ocasión perfecta para dejar de hacer las cosas como las venimos haciendo y empezar a hacerlas diferente, Albert Einstein decía: ¿Quieres resultados diferentes? has las cosas diferentes.

¿Si esta vez en lugar de quejarnos como el paralitico, de lamernos nuestras propias llagas y hacernos los sufridos espirituales, empezamos a discipularnos seriamente, a dejar las redes y leer la biblia a alejarnos de las malas influencias y nos congregamos fiel y regularmente?

Lo que sucede a continuación, después de las quejas y auto-compasión del hombre enfermo es una maravilla. 8 Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. 9 Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día.

Jesús NO pregunta por segunda vez, de hecho, él ya sabía la respuesta de este hombre, si le preguntó fue para el mismo paralitico se diera cuenta de su condición, Jesús tampoco le da explicaciones, ni le debate su situación, Jesús simplemente le da la orden de levantarse y andar, lo sana en el acto, sin necesidad de la fe del enfermo, sin preguntarle, sin tomarlo en cuenta para nada.

Una vez más la gloria del Hijo de Dios aparece claramente revelada. Esta recuperación no es ni gradual ni parcial; aquellos charlatanes que pretenden “curar por fe” deberían estudiar cuidadosamente este maravilloso relato, pues el enfermo no aportó nada, pues no tenía ya esperanza de nada.

Y ese es el punto máximo de nuestra enseñanza de este día, con esto deseo terminar por hoy, recapacite un momento, si DIOS nos preguntara si queremos ser salvos, si deseamos ser sus hijos, si queremos dejar el pecado y arrepentirnos para ir a los pies de Cristo reconociendo que él murió por nosotros y reconocerlo como nuestro Señor y Salvador, la respuesta sería siempre un rotundo NO.

Nadie quiere ni nadie puede, por eso es tan maravillosa la salvación monergista, porque todo lo hace DIOS, nosotros no aportamos nada, ni decidimos nada, ni nos pregunta nada, aun en lo natural podemos verlo ¿A quién de los presentes sus padres le preguntaron si deseaba nacer?

El orgullo de la naturaleza pecaminosa, ha hecho creer que si DIOS se comporta así es un tirano y opresor, pero no olvidemos dos puntos claves:

·         Somos su creación, somos de su propiedad, y él es Soberano.
·         Si no tomará él solo la decisión TODOS SERÍAS CONDENADOS AL INFIERNO.

Por eso es que el título de la enseñanza del día de hoy es: gracias Señor por no preguntar.

Nuestro señor y DIOS desea y ha planeado lo mejor para nosotros, y no nos va a preguntar si estamos de acuerdo, porque él sabe que, debido a la carne, no tenemos la perspectiva correcta, es como preguntarle a un niño pequeño que quiere de comer y dárselo.


Así que no ha de sorprendernos no solo que no nos preguntó si deseábamos ser sus hijos, él nos adoptó y ya, pero también no nos sorprenda cuando DIOS permita que pasemos por tribulaciones, por pruebas, sobre todo cuando quite de nuestra vida algo que nos gusta mucho pero que nos hace daño, al final DIOS sabe que es lo menor para nosotros, y para muestra basta ver que el paralitico tomo su lecho y después de 38 años de sufrir por fin pudo ponerse en pie y caminar.

miércoles, 26 de julio de 2017

Soteriología. Tema 3: El Decreto Divino. Cita: Salmo 2:7.

Tenemos un DIOS perfecto e infinito en sabiduría y poder, por lo cual es impensable que ese DIOS tan sublime, haya creado un mundo sin un plan igual de perfecto y bien delineado, un plan que tenga cada detalle, por mínimo que sea para cada una de sus criaturas.

Aun nosotros los seres humanos, que somos meramente una criatura de ese grandioso DIOS, y que somos de vidas cortas y propensos a cometer incontables errores, con todo y eso, somos propensos a planear lo mejor posible todas nuestras cosas, viajes, estudios, comidas, etc. De hecho, consideramos como insensatos a aquellos que no planean con anticipación.

La verdad del caso es que a pesar de que muchos se oponen a la predestinación teóricamente, todos la practicamos en la vida diaria. El arquitecto, antes de comenzar la construcción de un edificio, hace sus dibujos y traza sus planes, hasta los más minuciosos detalles; en su mente el edificio se haya terminado antes de colocarse la primera piedra. Así también sucede con el comerciante, con el abogado, con el agricultor, y con todo ser racional e inteligente". Yo mismo antes de presentar este tema, lo diseñe y elabore iniciando en mi mente.

Un universo sin decretos sería tan irracional y espantosos como un automóvil que va en la oscuridad sin luces y sin conductor, tal es la necesidad de que el universo y todo lo que en él existe sea regido por decretos bien establecidos por DIOS.

Antes de continuar dejemos en claro a lo que la teología sistemática reconoce como decreto, la definición de la confesión de Fe de Westminster nos ayudará mucho:

Dios desde la eternidad, por el sabio y santo consejo de su voluntad, ordeno libre e inalterablemente todo lo que sucede. Sin embargo, lo hizo de tal manera, que Dios ni es autor del pecado, ni hace violencia al libre albedrío de sus criaturas, ni quita la libertad ni contingencia de las causas secundarias, sino más bien las establece, nosotros lo estudiamos y lo entendimos como la predestinación.

El decreto de Dios es su propósito o su determinación respecto a las cosas futuras, hemos usado el singular, como hace la Escritura, porque sólo hubo un acto de su mente infinita acerca del futuro, no son los decretos, es uno solo: hacer todo para su propia gloria, a partir de ahí se desprenden sus planes o propósitos como medio para lograr el decreto eterno primario o principal.

Dios decretó como ha de funcionar y todo lo que va a hacer con exactitud increíble todas y cada una de sus criaturas, cual arquitecto, ingeniero, etc. DIOS planeó perfectamente cómo ha de funcionar cada parte de su infinita creación para su propia gloria.

Nosotros hablamos como si hubiera habido muchos, porque nuestras mentes sólo pueden pensar en ciclos sucesivos, a medida que surgen los pensamientos y ocasiones; o en referencia a los distintos objetos de su decreto, los cuales, siendo muchos, nos parece que requieren un propósito diferente para cada uno.

Pero el conocimiento Divino no procede gradualmente, o por etapas. Hechos 15:18. Las Escrituras mencionan los decretos de Dios en muchos pasajes y usando varios términos.

La palabra “decreto” se encuentra en el Salmo 2:7. En Efesios 3:11, leemos acerca de su “determinación eterna”. En Hechos 2:23, de su “determinado consejo y providencia”. En Efesios 1:9, el misterio de su “voluntad y beneplácito”. En Romanos 8:29, que él también “predestinó”.

Los decretos de Dios son llamados sus “consejos” para significar que son perfectamente sabios. Son llamados su “voluntad para mostrar que Dios no está bajo ninguna sujeción, sino que actúa según su propio deseo, en el proceder Divino, la sabiduría está siempre asociada con la voluntad, y, por lo tanto, se dice que los decretos de Dios son “el consejo de su voluntad”. Los decretos de Dios están relacionados con todas las cosas futuras, sin excepción: todo lo que es hecho en el tiempo, fue predeterminado antes del principio del tiempo, en la eternidad pasada.

Si hemos entendido bien lo anterior acerca del decreto eterno de DIOS, lo que ahora toca entender en relación de ese decreto con la soteriología bíblica es: ¿Cuál fue el orden lógico del decreto de la salvación eterna?

Hace mucho que ya entendimos que nuestro DIOS, es el DIOS del Pacto, en la eternidad pasada el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo pactaron inter-trinitariamente nuestra redención, por ello es que la muerte de Cristo en la cruz no fue el plan b o emergente de DIOS, sino que fue predestinada desde antes de que el mundo fuera creado. 1ª Pedro 1:19-20. Apocalipsis 13:8.

Para nuestro estudio de la doctrina de la salvación ahora veremos las dos más importantes posturas que se han desarrollado en torno a la salvación y el decreto eterno:

1.    Supralapsarianismo.
2.    Infralapsarianismo o sublapasarianismo o postlapsarianismo.

La palabra lapsus del latín significa caída, el prefijo supra, significa antes y los prefijos infra, supra y post significan después, por lo tanto, es:


·         Supralapsarianismo: antes de la caída.
·         Infralapsarianismo: después de la caída.

¿Antes o después de la caída que? Lo que se plantea, es ¿Cuándo se predestinó la salvación y la reprobación?, o, en otras palabras, ¿Cuándo DIOS hizo su elección de salvación y reprobación? ¿Antes o después de decretar la caída en pecado del ser humano?

Ya hemos entendido previamente y en muchas ocasiones que es DIOS y solo DIOS quien elige a aquellos que han de ser salvos y a otros simplemente NO los elige, en el tema de eligió en las 7 etapas de la salvación, vimos que una de las características de esa elección divina es que es libre o soberana y verdadera.

Verdadera: DIOS elige a unos para salvación y a otros no. Marcos 13.22 y 27. Lucas 18:7. Colosenses 3:12. Tito 1:1. 1ª Pedro 1:2. Juan 15:16 y 19. Juan 17.24. Hechos 2:47. Hechos 13:48. Romanos 9:22-23. Romanos 11:7.

Libre: En su soberanía, DIOS tiene la autoridad y todo el derecho y por consecuencia es libre de ELEGIR a quien Él solamente quiere. Romanos 9:9-16 y Romanos 9:20-22.

En este punto espero no detenernos pues ya hemos asimilado que en DIOS no hay ninguna injusticia al hacer esto, por el contrario, si TODA la humanidad era merecedora de su justa y santa ira, entonces el hecho de que Él haya decidido rescatar a unos cuantos, que Él mismo elige no solo es Bueno, es Misericordioso en extremo.

Pero, esa no es la cuestión el día de hoy, el punto es, que como ya lo entendimos, DIOS planea cada mínimo detalle con una eternidad de anticipación, eso quiere decir que nuestra salvación la planeó toda de antemano, eso incluye:

·         La creación del ser humano.
·         La caída en pecado.
·         La elección de unos a salvación.
·         La reprobación de otros.
·         La cruz de Cristo como medio de salvación.
·         El llamado a salvación de los elegidos.

El punto aquí es ¿Cuál es el orden lógico y bíblico de las cosas? no cronológico, pues no podemos sujetarlo al tiempo, porque esto se decretó en la mente de DIOS en la eternidad pasada, por lo tanto, el tiempo no entra en la ecuación.

El Supralapsarianismo nos da el siguiente orden lógico:

1.    Elegir a los que son salvos.
2.    Reprobar al resto.
3.    La creación del ser humano.
4.    Permitir la caída.
5.    Proveer la salvación en la cruz.
6.    Llamar a la salvación a los elegidos.

Uno de los mayores exponentes del Supralapsarianismo es el teólogo Vincent Cheung, él enseña que el Supralapsarianismo le da mayor gloria a DIOS, Cheung escribió:

Dios creó a los electos y los réprobos porque Él deseó manifestarse a Sí mismo y ser glorificado a través de ellos. Aunque los reprobados no glorifiquen conscientemente a Dios, Él se glorifica a Sí mismo a través de ellos por medio de lo que Él los causa a hacer y lo que Él hace en ellos. Él es glorificado por medio de los electos en su salvación y en los reprobados en su condenación.

El Infralapsarianismo se apega al siguiente orden lógico:

1.    La creación del ser humano.
2.    Permitir la caída.
3.    Elegir a los que son salvos.
4.    Reprobar a los demás.
5.    Proveer la salvación en la cruz.
6.    Llamar a los elegidos.

El Infralapsarianismo, defendido por teólogos de la talla de Louis Berkhof sugiere que el decreto de Dios de permitir la caída lógicamente precede a Su decreto de elección. Así es que cuando Dios escogió al elegido y pasó por alto al no-elegido, El los contemplaba como criaturas caídas.

En muchos lugares conocen a los calvinistas que se apegan el Supralapsarianismo como híper-calvinistas o fatalistas, porque esta postura de una impresión muy fatalista de DIOS, sin embargo, no debemos confundirnos, pues el sobrenombre lo recibieron de arminianos no convencidos de la soberanía total de DIOS. A los calvinistas que nos apegamos al Infralapsarianismo muchas veces se nos reconoce como calvinistas moderados.


La siguiente tabla nos mostrará mejor ambas posturas frente a frente:





Supralapsarianismo.

Infralapsarianismo.

Decreto de:


Salvar y condenar.


Decreto de:


Crear elegidos y condenados.


Crear a los seres humanos aún sin elegir.

Decreto de:


Permitir la caída.

Permitir la caída.

Decreto de:



Salvar y condenar.

Decreto de:


Proveer la salvación en la cruz.


Proveer la salvación en la cruz.


Decreto de:


Llamar a los elegidos.

Llamar a los elegidos.

No vamos a terminar hoy el debate que lleva siglos dándose entre calvinistas infra y supra, desde que en Westminster se redactó la confesión de Fe reformada viene dándose la controversia, aunque es muy cierto que la mayoría de las confesiones históricas fueron muy cuidadosas en no usar un lenguaje que favorezca ninguna posición.

Aun así, históricamente la gran mayoría de los cristianos de fe reformada histórica se apegan al Infralapsarianismo, el cual pare estar redactado en Los cánones de Dort el en artículo 7:

La elección es un propósito inmutable de Dios por el cual Él, antes de la fundación del mundo, de entre todo el género humano caído por su propia culpa, de su primitivo estado de rectitud, en el pecado y la perdición, predestinó en Cristo para salvación, por pura gracia y según el beneplácito de Su voluntad, a cierto número de personas, no siendo mejores o más dignas que las demás, sino hallándose en igual miseria que las otras, y puso a Cristo, también desde la eternidad, por Mediador y Cabeza de todos los predestinados, y por fundamento de la salvación.

Y, a fin de que fueran hechos salvos por Cristo, Dios decidió también dárselos a él, llamarlos y atraerlos poderosamente a Su comunión por medio de Su Palabra y Espíritu Santo, o lo que es lo mismo, dotarles de la verdadera fe en Cristo, justificarlos, santificarlos y, finalmente, guardándolos poderosamente en la comunión de Su Hijo, glorificarlos en prueba de Su misericordia y para alabanza de las riquezas de Su gracia soberana.


Conforme está escrito. Romanos 8:30. 1ª Corintios 1:27-31. Efesios 1:4-6.

lunes, 24 de julio de 2017

El Evangelio De Juan 33: El Segundo Milagro De Jesús. Juan 4:45-54.

El día de hoy llegamos al final de cuarto capítulo de la predicación expositiva del evangelio de Juan, este capítulo comienza cuando Jesús decide, en total obediencia al padre pasar por la región de samaria en su viaje de Judea a Galilea.

En su paso por samaria, al calor del mediodía, cansado del camino, hambriento y sediento, Jesús tiene una poderosa entrevista con una mujer que después de ser confrontada con su estilo de vida inmoral, rectifica el camino y no solo ella, sino muchos más en su pueblo creyeron en aquel que da agua de vida eterna.

Después de pasar 2 días compartiendo el mensaje del evangelio en samaria, ahora Jesús se dirige a la región, que, si ciertamente NO lo vio nacer, pues él nació en Belén de Judá, si es la región que lo vio crecer, pues paso su niñez y juventud en Nazaret en Galilea.

Los galileos, como lo entendimos la semana pasada, al principio, se mostraron escépticos, al grado de menospreciar no solo el oficio profético del Señor, sino la salvación misma que solo Cristo puede ofrecer, sin embargo, en los siguientes versículos leemos que recompusieron el camino al cambiar de actitud.

En el versículo 45 leemos que, al llegar a la región de Galilea, lo recibieron de diferente manera, al presenciar los milagros y señales hechas durante la fiesta de la pascua en Jerusalén. Juan 2.23.

A partir del verso 46, el apóstol Juan comienza a relatar el segundo milagro de Jesús, no sin antes dejar en claro que fue precisamente ahí, en Galilea donde se dio el primero, al convertir el agua den vino, en las bodas en Caná.

En Capernaum un oficial del rey tenía su hijo enfermo.

Capernaum como lo entendimos anteriormente, es un poblado que pertenece, junto con Caná y Nazaret, a la región de Galilea, era una ciudad situada a las orillas del mar de Galilea, el nombre de la ciudad significa aldea de Nahúm, aunque cabe aclarar que el profeta del A.T. no nació ahí.

Jesús estuvo en Capernaum tanto tiempo e hizo tantas señales ahí que al cabo de un tiempo fue llamada su ciudad: Mateo 9:1. Marcos 2:1. Fue también en Capernaum que Jesús llamó a Mateo (también llamado Leví) al apostolado mientras estaba en el despacho de recolección de impuestos.

Ya que en ese lugar se recolectaban impuestos, era altamente probable que hubiera ahí una guarnición militar para supervisar que este negocio marchará bien, es por eso que un oficial del rey radicaba en esa ciudad.

Cuando el rey Herodes el grande, quien mando ejecutar la matanza de los niños, murió en el año 4 d.C. su reino quedó divido:

·         Arquelao, gobernaba Judea, Samaria y parte de Idumea.
·         Felipe, a cargo de Iturea y Traconite.
·         Herodes Antipas, quien gobernaba la mayor parte de Galilea y Perea.

Por lo tanto, el rey al que se refiere el apóstol Juan es este último, Herodes Antipas, es él quien encarcela y manda a ejecutar a Juan el bautista como ya lo vimos anteriormente.

En el versículo 47 leemos que, cuando oyó (el oficial del rey) que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir.

La desesperación y el agobio por la grave enfermedad de su hijo, hizo que el oficial del rey fuera a buscar a Jesús, de esta situación podemos aprender que el hecho de tener un buen puesto, un buen trabajo, una vida cómoda o títulos, no nos dan la garantía de nunca pasar por los problemas cotidianos de la vida, no garantizan que nunca tendremos familiares enfermos o que nosotros mismos nunca pasemos por ese trago amargo.

Eso obviamente nos incluye a los cristianos, de todo lugar, de cualquier denominación, es un engaño decir que por ser hijos de DIOS no pasaremos por tribulaciones en esta vida, de hecho, como lo hemos entendido anteriormente, es todo lo contrario, el verdadero cristiano sufre de persecución, vituperios, tribulaciones, etc. Romanos 8:35-39.

Otra enseñanza que nos deja este pasaje, es que aún el hombre más grande, de mejor posición, al acudir a DIOS en busca de auxilio, se vuelve como un pordiosero que extiende su mano en busca de una ayuda, a pesar de su alto rango, se humillo al pedirle ayuda a Jesús, caminó alrededor de 25 km desde Capernaum hasta Caná para rogar en persona, no envió un criado como el centurión romano de Lucas 7:1-10.

Ya sea un centurión romano, un oficial del rey, una mujer con flujo de sangre durante 12 años, no importa, siempre que alguien viene a Jesús en busca de ayuda, de consuelo, de auxilio, él siempre nos recibe con los brazos abiertos, jamás nos rechaza, de hecho, nos hizo la invitación de venir a sus pies a descansar. Mateo 11:28.

Reflexionemos un momento, ¿Por qué pasan las cosas en nuestra vida? ¿Por qué los problemas nos llegan de repente? ¿Por qué somos agobiados? Le puedo decir que la respuesta es solo una: para ir a Cristo.



Ya sea un inconverso, que vive alejado del evangelio, o un hijo de DIOS que lleve tiempo caminando en la Verdad, todo lo que pasamos está ligado a la persona de Jesucristo, para ir a más con Él, para buscarlo como desesperados, para humillarnos debajo de Él, para rogarle que meta su mano en nuestras vidas, para ser más como Él.

Por la respuesta que Jesús le da a este oficial, podemos deducir que estuvo en la fiesta en Jerusalén y fue testigo de las señales que Jesús realizó allá. Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y prodigios, no creeréis.

Jesús primero tiene que confrontar al oficial del rey, humillarlo, encararlo con su realidad, para que su corazón se reblandezca y sea tierra fértil. ¿Por qué tiene que ser así? Porque de no ser así NADIE buscaría a DIOS, nadie querría saber nada de Él, la comodidad, la prosperidad, el bienestar, nos tendrían alejados para siempre de DIOS, pensando que no nos hace falta, que tenemos todo lo necesario para ser felices: salud, riqueza, amor, ¿DIOS? No gracias, ahora no, tal vez después, diríamos todos.

El hecho de que DIOS nos sacuda, y lleguen problemas a nuestras vidas, a un verdadero hijo de DIOS le causa gozo, no alegría, no felicidad que son emociones pasajeras y externas, nos cusa gozo que es la motivación interna y eterna de saber que DIOS sigue trabajando en nosotros, que nos recuerda y nos ama, al grado de hacer lo que sea necesario para que lleguemos a los pies de Cristo o para que los que estamos a sus pies le reflejemos fielmente.

El oficial del rey acepta humildemente las fuertes palabras de Jesús y respetuosamente se vuelve a dirigir a él para rogar nuevamente por su hijo: 49 El oficial del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi hijo muera.

Vemos que no tomó las palabras de Jesús como una afrenta ni como un rechazo, pues insistió en su petición y continuó en su lucha hasta prevalecer. Estaba tan preocupado por la salud de su hijo, que no parecía atender a ninguna otra cosa.

Sin embargo, descubre la debilidad de su fe, pues cree que Jesús puede curar a su hijo antes de que éste muera, pero no cree que Jesús tenga poder para resucitarle. Había olvidado que Elías y Eliseo habían resucitado a personas; ¿y acaso era Cristo inferior en poder a dichos profetas? Obsérvese la prisa que le da a Jesús, como si hubiera peligro de que al Hijo de Dios se le pudiera escapar el tiempo.

¿Alguna vez has dudado que DIOS este haciendo lo mejor en tu vida?
¿Alguna vez has dudado que este obrando a tiempo?

No eres el primero y ciertamente no serás el último, parte de las consecuencias del pecado en nuestras vidas es la impaciencia y la duda en la Soberanía de DIOS, la misma duda que sembró la serpiente al decir no morirán, acecha nuestros corazones, para eso DIOS nos ha regalado la FE, la fe no es creer en DIOS, los demonios también creen, la Fe es creerle a DIOS, al DIOS Todopoderoso y Soberano de la Escritura.

Si DIOS está obrando algo en nuestras vidas, por difícil de entender o asimilar que sea, es importante tener la certeza es decir la FE en que es lo mejor para nuestras vidas, y que lo está haciendo en el tiempo correcto, ni antes, ni después, pues DIOS nunca se equivoca. Isaías 45:9.

A pesar de la duda que asaltaba a este pobre hombre desesperado, no deja de recordarnos en su actitud a la viuda descrita en la parábola de Lucas 18:1-8. Dicha parábola nos enseña a insistir, a nos desmayar en la oración.

La oración la vemos como el último recurso, frases como: ya solo me queda orar por tal o cual situación son frecuentes entre nosotros por no darle el real valor a la oración, pensamos que orar es pesado, aburrido, cansado, hasta inútil, ¿Para qué orar si DIOS no va a hacer nada? Pensamos muchas veces.

Muchas veces nosotros mismos nos sentimos como esa viuda que clamaba al juez injusto o como ese oficial del rey, estamos en la miseria espiritual y emocional por los problemas y las situaciones difíciles, en la escuela, en el trabajo, en el hogar mismo, olvidamos que: La oración no tiene como propósito cambiar la voluntad de DIOS la oración tiene como propósito cambiarnos a nosotros.

Jesús ya había decidió obedecer al Padre y sanar al hijo del oficial, pero lo que estaba en juego no era la sanidad en sí misma sino el moldear el corazón de este pobre hombre, de humillarlo hasta que reconociera que solo no podría hacer nada, que necesitaba intervención divina en su vida, su petición no cambió o influyó en la decisión de Jesús, su petición moldeo su propio corazón.

No me malinterpreten no es que no debamos de pedir, no es que ya no vamos a orar pues de todos modos DIOS es soberano y va a hacer lo que Él sabe que es mejor, por el contrario, saber que DIOS es soberano debe alentarnos aún más a orar, pues tenemos la seguridad de que va a darnos la respuesta perfecta, aunque muchas veces esa no sea la respuesta que queremos escuchar, pero al final es la mejor.

¿Entonces cómo es que debemos de orar cuando tenemos una petición? Igual que siempre, rogando humildemente, suplicando y pidiendo, PERO RECONOCIENDO QUE SE HACE SU VOLUNTAD y que su voluntad es perfecta, tal como Jesús en el huerto de Getsemaní: Lucas 22: 41-44.

El no reconocer esta verdad ha llevado a muchos cristianos sinceros y humildes a la frustración espiritual:

·         Le pedí a DIOS salud de mi esposo y no me dio nada.
·         Rogué por un mejor trabajo y no respondió.
·         Suplique por mi economía y DIOS no escuchó.
·         Clame por mi familia y no pasó nada.

Son frases muy comunes entre los cristianos que ignoran la Soberanía de DIOS, el engaño de las doctrinas humanistas hace estragos en la iglesia.


Nunca olvidemos que DIOS responde absolutamente todas nuestras oraciones y/o peticiones, de 3 formas:

·         Si.
·         No.
·         Aun no es tiempo.

Si la respuesta es como al oficial del rey: ve, tu hijo vive, o si fuera, deja que los muertos entierren a los muertos, ES LO MEJOR PARA NOSOTROS.

En el versículo 50 leemos Jesús le dijo: Vé, tu hijo vive. Y el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue. La confrontación dio su fruto, el trato de Jesús no fue en vano, siempre da el resultado deseado, se cumple que la Palabra no regresa vacía, cumple el cometido por el cual es enviada, en este caso: FE. Romanos 10:17.

Juan nos muestra que su FE fue confirmada: 51 Cuando ya él descendía, sus siervos salieron a recibirle, y le dieron nuevas, diciendo: Tu hijo vive. 52 Entonces él les preguntó a qué hora había comenzado a estar mejor. Y le dijeron: Ayer a las siete le dejó la fiebre. 53 El padre entonces entendió que aquella era la hora en que Jesús le había dicho: Tu hijo vive; y creyó él con toda su casa.

La sanidad, nos lo da a entender Juan, fue instantánea por obra de Jesús, no fue la recuperación lenta esperada normalmente, además fue a la hora exacta en que Jesús lanzó la Palabra, lo cual confirma aún más que fue DIOS y solo DIOS quien lo hizo, lo cual lo llevó a predicarle a toda su casa, es decir familiares, amigos y criados que allí vivieran.

Para cerrar su relato Juan nos dice 54. Esta fue la segunda señal que hizo Jesús, cuando llegó de Judea a Galilea.

Después de volver de Judea a Galilea, ésta fue la segunda señal que el Señor hizo en este
último lugar. Ambas ocurrieron en Caná. En las dos manifestó el Señor su gloria. Primero,
al transformar el agua en vino, mostró su control absoluto sobre el universo físico. Y ahora,
por medio de esta segunda señal, hace ver que la distancia no representa un verdadero
obstáculo para la manifestación de su amor y poder, por consiguiente, en los dos casos el Salvador se revela como el Hijo de Dios.

Ese es el mayor milagro que en la actualidad podemos recibir, que Cristo sea manifestado en gloria y majestad a nuestras vidas, para que caigamos a sus pies, reconociendo nuestra necesidad de Él, no importa si ya somos hijos de DIOS, pues muchas veces nuestra relación se enfría y es lejana, y lo mejor que nos puede pasar es como al oficial del rey: ser sacudidos de nuestra vida de comodidad, pero alejados del Camino del Señor.


Un Dios Santo 11: Contender con Dios Parte 1. Habacuc 1:2-4.

La máxima expresión de la ira y la justicia de Dios se pueden ver en la cruz del calvario, es ahí donde la justicia santa de Dios se hace ...