miércoles, 29 de enero de 2020

CFB 1689 Tema 7: La Creación. Cita: Hebreos 1:1-2.



Confesión capítulo 4: De la creación

I.        Declaración bíblica. En el principio agradó a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo,1 para la manifestación de la gloria de su poder, sabiduría y bondad eternos,2 crear o hacer el mundo y todas las cosas que en él hay, ya sean visibles o invisibles,3 en el lapso de seis días,4 y todas muy buenas.5

1.    El tiempo y Autor de la creación. He. 1:2; Jn. 1:2,3; Gn. 1:2; Job 26:13; 33:4.

La obra de la creación es una obra trinitaria, Padre, Hijo y Espíritu Santo participaron activamente en ella.

2.    El propósito de la creación: manifestar la gloria de DIOS. Ro. 1:20; Jer. 10:12; Sal. 104:24; 33:5,6; Pr. 3:19. Hch. 14:15,16.

La obra de la creación manifiesta visiblemente la majestad y grandeza de la Gloria divina.

3.    Extensión o esfera de la creación. Gn. 1:1; Jn. 1:3; Col. 1:16. He.11:3.

Absolutamente todo lo que hay en el universo ha sido creado por DIOS, lo visible y aun lo que no alcanzamos a ver.

4.    Duración de la obra de creación. Gn. 2:1-3; Ex. 20:8-11.

La CFB 1689, al igual que las grandes confesiones históricas, basadas en el relato bíblico, sostiene que el lapso de la creación fue de 6 días literales.


Hay dos grandes corrientes que van en contra de esta afirmación, los que afirman que los días son eras en realidad de miles o hasta millones de años, y que por lo tanto la tierra tiene millones de años de existir, tal como lo afirma la ciencia moderna y los más radicales que afirman que el relato de la creación y de hecho, los 11 primero capítulos del libro primero de Moisés son en realidad mitos en lo que expresaron su forma de concebir las cosas.

No podemos apegarnos a ninguna de estas dos variantes, pero mucho menos a la segunda, pues:
Creer que la biblia tiene mitos es adoptar una mentalidad pagana y no cristiana de la Escritura.


Este tipo de pensamientos tienen consecuencias teológicas. Esta es la razón por la cual los pensadores reformados como Geerhardus Vos, Louis Berkhof y D. Martin Lloyd-Jones adoptaron la interpretación literal de Génesis en general y la creación de 6 días en particular.

Entendieron que los eventos incluidos en la creación de 6 días son esenciales para la teología cristiana, hay varias razones teológicas que vale la pena considerar:

1. La bondad de Dios debe reflejarse en la creación original. Romanos 8:21. Esto es lo que vemos en Génesis 1. Dios dice que Su creación original es buena y muy buena. Era un mundo de abundancia y belleza, sin animales carnívoros (Génesis 1:30) y sin corrupción ni muerte. Sin embargo, esta imagen de un mundo bello y diseñado artísticamente solo se ajusta a la cronología de la creación de 6 días. Si uno adopta la cronología longeva, uno debe aceptar que la tierra estuvo ausente del universo durante sus primeros 9 mil millones de años. Después de un evento galáctico de enfriamiento, la tierra se formó lentamente a través de miles de millones de años de ambientes inhabitables.

2. El pecado de Adán provocó la corrupción y la muerte universal. Según la cronología longeva, la corrupción siempre ha sido parte del universo. Esto se puede ver en el registro fósil que supuestamente representa 540 millones de años de sufrimiento y muerte animal. Esto proporciona imágenes de un mundo a menudo lleno de espinas y cardos.

Desde este punto de vista, el pecado de Adán no pudo haber sido la causa última de la corrupción universal.

Como evento histórico, su desobediencia ocurrió mucho después de la corrupción. Pero según la creación de 6 días, el pecado de Adán precede a la maldición de Dios sobre la creación. El sufrimiento y la muerte de los animales se produjo como resultado de la desobediencia de Adán, no antes de ella. Las espinas y los cardos eran parte de la maldición, no anterior a esta. Esto es lo que Pablo afirma en Romanos 8:21. Es lo que la teología sana siempre ha afirmado: a Adán se le dio el dominio sobre toda la creación al principio; cuando pecó, toda la creación sufrió corrupción como consecuencia de su relación única con él.

3. Las Escrituras se deben usar para interpretar las Escrituras. Las dos interpretaciones (literal y metafórica) pretenden ser precisas, pero solo aquella que pase intacta a través de la totalidad de la Biblia es verdadera. Esto es lo que vemos con los eventos asociados con la creación de 6 días: se afirman a lo largo de toda la Biblia.

·         Moisés cuando conecta la semana de la creación con una semana normal en el cuarto mandamiento. Éxodo 20.
·         Isaías 42:5 cuando afirma que Dios creó al hombre al mismo tiempo que creó los cielos y la tierra.
·         Jesús cuando explica la destrucción global del diluvio a la luz de su segunda venida. Mateo 24.
·         Lucas investiga la historia del mundo a través de una sola genealogía. Lucas 3.
·         Pablo relaciona el trabajo de Adán con la obra de Cristo. Romanos y 1ª Corintios.
·         Pedro muestra la relación entre la creación, el diluvio global y el juicio venidero. 2ª Pedro.

Solo hay una secuencia histórica que se ajusta consistentemente: la creación de 6 días.

4. El día de reposo. Éxodo 31:15-17. El día de reposo es señal y un pacto que atestiguan el hecho de que DIOS, el DIOS de la Escritura y del Pueblo de Israel, hizo los cielos y la tierra en seis días y reposó el séptimo día. Por ello es que no solamente fue mencionado en los diez mandamientos, sino que fue repetido para recalcar su trascendencia.

Israel descansaba el Sabbath como señal de que el Señor hizo los cielos y la tierra en 6 días literales.

5. Las doctrinas esenciales están relacionadas con la historia. Pablo establece la conexión necesaria entre los eventos de la historia y la doctrina cristiana en 1ª Corintios 15 con la resurrección. Pedro hace lo mismo en 2ª Pedro 3 con la creación, el diluvio y el juicio final. Sin embargo, solo dentro del marco histórico de la creación de 6 días todos estos eventos se unen al tejido del tiempo.

Por ejemplo, si las gruesas capas de roca con fósiles son el resultado de un diluvio global, son un recordatorio físico del juicio global de Dios sobre la tierra en el pasado, así como en el futuro. Sin embargo, si uno adopta la cronología convencional, esas enormes capas son simplemente un testimonio de millones de años. El juicio de Dios se borra de la tierra, y quizás se pasaría por alto en el futuro.

La creación de 6 días es la única opción viable a largo plazo para la teología sana. Como dijo D. Martin Lloyd-Jones:

No tenemos evangelio real a menos que todo en Génesis sea una historia literal.

5.    El resultado de la creación. Gn. 1:31; Ec. 7:29; Ro. 5:12.

Originalmente, todo lo que DIOS creó fue muy bueno.

II.        La corona de la creación: el hombre. Después que Dios hubo creado todas las demás criaturas, creó al hombre, varón y hembra, con almas racionales e inmortales, haciéndolos aptos para la vida con Dios para la cual fueron creados;1 siendo hechos a imagen de Dios, en conocimiento, justicia y santidad de la verdad;2 teniendo la ley de Dios escrita en sus corazones, y el poder para cumplirla y, sin embargo, con la posibilidad de transgredirla, por haber sido dejados a la libertad de su propia voluntad, que era mutable.3



1.    Constitución del hombre. Gn. 1:27; 2:7; Stg. 2:26; Mt. 10:28; Ec. 12:7.1 Tes 5:23. He.4:12.

Las citas nos indican que el hombre consta de tres partes: espíritu, alma y cuerpo.

·         El espíritu como nuestra parte más profunda, es la parte interna y más íntima de nuestro ser, por el cual somos conscientes de Dios, y por él tenemos contacto con Dios. Jua 4:24; Rom. 1:9.
·         El alma es nuestro mismo yo: Mat. 16:26; Luc 9:25, es un intermediario entre nuestro espíritu y nuestro cuerpo; por ella somos conscientes de nosotros mismos y tenemos nuestra personalidad.
·         El cuerpo como nuestra parte exterior es el órgano externo; por él somos conscientes del mundo y tenemos contacto con el mundo material.



Los seres humanos somos almas que tenemos un espíritu y habitamos en un cuerpo.

El espíritu humano es la esencia y el centro de nuestra existencia. Antes de que confiáramos en Cristo, no teníamos una identidad con significado, debido a que nuestro espíritu estaba muerto o indiferente a DIOS. Pero cuando confiamos en Jesucristo, el Espíritu de Cristo vino a nosotros y obtuvimos una identidad arraigada en Cristo; Pedro dice que nos convertimos en participantes de la naturaleza divina. 2ª Pedro 1.4.
2.    Identidad del hombre. Gn. 1:26,27; 5:1-3; 9:6; Ec. 7:29; 1 Co. 11:7; Stg. 3:9; Col. 3:10; Ef. 4:24.

De toda la vasta creación, solamente el hombre es portador de la imagen divina.

La imagen de DIOS no es algo que tenemos o poseemos, es algo que el hombre es, esta es nuestra identidad y lo que nos da sentido de existir, fuimos creados para ser un vivo reflejo moral de nuestro creador.

La caída en pecado dañó la imagen de DIOS, pero no la borró por completo de nosotros. 1ª Cor 11:7. Stg. 3:9.

3.    Integridad del hombre. Ro. 1:32; 2: 12a,14,15; Gn. 3:6; Ec. 7:29; Ro. 5:12.

Parte de la imagen y semejanza divina puesta en el hombre son la integridad con la que fue creado y la libertad de elegir, por este motivo seremos sujetos a juicio, pues no tenemos excusa para no vivir íntegramente, en palabras más asimilables:

Somos seres moralmente responsables por todas y cada una de nuestras acciones, pensamientos y decisiones.


III.        El clímax de la creación. Además de la ley escrita en sus corazones, recibieron un mandato de no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal; y, mientras lo guardaron, fueron felices en su comunión con Dios y tuvieron dominio sobre las criaturas.1

1.    La comunión y el llamado a la obediencia. Gn. 1:26-28; 2:17








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