Ya terminamos de estudiar el misterio de la Unión Hipostática, por medio de la
Palabra de Verdad entendimos que esta doctrina además de ser fundamental para
que muchas otras enseñanzas y el cristianismo bíblico se mantenga de pie,
también nos enseña que las dos naturalezas completas y perfectas, la naturaleza
humana y la naturaleza divina se unen de forma perfecta e inseparable en la
única persona de Jesucristo el Verbo de DIOS, la segunda persona de la
Trinidad.
Muy apegado a la doctrina de la unión hipostática,
viene otra doctrina que por la palabra usada por el apóstol Pablo en la cita de
Filipenses 2:7 se le ha nombrado La Kenosis.
¿Qué es la Kenosis?
¿Qué significado tiene?
¿Qué implicaciones tiene para el cristianismo?
¿Por qué es importante estudiar este tema?
¿Cómo repercute en la persona y obra de nuestro Señor
Jesucristo?
Primeramente, entendamos que a la Kenosis se le conoce
también como auto despojo de Cristo, pues el verbo despojar que usa Pablo
viene del griego Kenoo (κενόω, G2758) y significa vaciar, despojar, denigrar, neutralizar y
desvanecer.
¿De qué se auto despojo Cristo al venir al mundo como
ser humano?
Aquí es donde ha habido varias confusiones, Algunos
dicen que al momento de la encarnación el Logos abandonó todos sus atributos
divinos; otros, que abandonó sólo los atributos relativos, como omnisciencia,
omnipotencia, omnipresencia; otros, que el Logos renunció al uso de sus
atributos divinos; y todavía otros, que el Logos actuó como si no poseyese
atributos divinos.
Ciertamente no es que abandonara alguno de los
atributos divinos esenciales. La naturaleza divina no podía ser abandonada sin
que Él dejara de ser quien era (dejaría de ser la perfecta unión hipostática).
Además, lo que dijo en Juan 10:30 sería falso, pues al despojarse de atributos tales como
omnisciencia u omnipresencia deja automáticamente de ser DIOS.
Hay otros que dicen que la kenosis en realidad habla
de que la humanidad de Cristo fue con el propósito de disfrazar su deidad, aunque es una herejía menos abierta no deja de
negar su deidad completa y plena, pues para ellos el disfraz abarcó un cambio total en la persona del Verbo, y niegan la
unión hipostática tan esencial para el cristianismo, además que contradice abiertamente
la cita de Juan 14.9.
Si hacemos una exegesis más exhaustiva al pasaje de Filipenses 2:7 veremos que en ningún
momento nos dice que Cristo se haya “vaciado de ciertos poderes o atributos
divinos” ni nada por el estilo, más bien lo que Cristo hizo fue vaciarse así
mismo tomando forma de siervo que se
entiende en venir a vivir como un ser humano y al manifestarse como tal fue que
se humilló así mismo. Filipenses 2:8.
Por lo tanto, el contexto mismo de este pasaje
interpreta que el vaciarse, el despojarse es el equivalente a humillarse al
tomar una posición y un status más bajo, esta kenosis es de funciones y status
no de atributos esenciales ni de naturaleza, sino que asumió un papel más
humilde al que en su deidad tenía. Salmo
113:1-6.
Si abrimos todavía un poco más el contexto queda más
clara la correcta interpretación: Filipenses
2:3-5. Pablo pone como ejemplo de humildad el auto despojo de Cristo para
que los filipenses imiten esta actitud, ciertamente Pablo no está pidiéndole a
los filipenses que se despojen de atributos propios de los seres humanos como
su inteligencia, su fuerza o sus habilidades y talentos para que se conviertan
en una versión disminuida de sí mismos, más bien usa el ejemplo de cristo para
que aprendan a poner primero los intereses de los demás antes que los suyos
propios.
Por lo tanto, la mejor manera de entender la kenosis en su contexto correcto es que Cristo dejó su status y
privilegios que eran suyos en el cielo y se vacío así mismo en un ser humano
por amor a nosotros.
Toda la gloria que recibía, todas las alabanzas de los
querubines protectores de su trono, la adoración celestial que continuamente y
desde la eternidad y hasta la eternidad no dejan de cantar SANTO, SANTO, SANTO,
a los ángeles y arcángeles postrados a sus pies, el cielo y la tierra contando
su gloria, el Padre y el Espíritu Santo mismos al lado suyo compartiendo todo
esto, el Verbo decidió dejarlo a un lado POR AMOR a los elegidos de DIOS. Juan 17.5. 2ª Corintios 8:9.
El decir que la kenosis es que Cristo voluntariamente
se despojó de algunos de sus atributos divinos o que por completo dejó su
divinidad en el cielo es totalmente contradictorio a la Escritura en general y
a la doctrina de la unión hipostática en particular.
El auto despojo como bien su nombre lo
indica fue algo que el verbo hizo por voluntad propia, no fue obligado ni por
el Padre ni mucho menos porque tuviera una deuda o algún deber para con los
seres humanos, nadie obligo a Cristo a venir a este mundo en forma humana ni a morir
en la cruz como propiciación por nuestros pecados. Juan 10.17-18.
Este auto despojo permitió la adición de la humanidad
y no implicó la sustracción de Su deidad en ninguna manera, ni el uso de los
atributos de la Deidad. Hubo un cambio de forma, pero no del contenido del Ser
Divino. El no renunció a la deidad ni al uso de esos atributos; El agregó la
humanidad a su ser para poder morir en la cruz. Isaías 53:12.
En pocas palabras, la kenosis fue con el propósito de tomar forma humana
para poder morir y así efectuar la redención planeada por el Padre.
A pesar de ser DIOS
encarnado, Jesucristo eligió vivir como un ser humano dependiendo en todo
momento del Padre, y de hecho los milagros, las sanidades, los prodigios, las
predicaciones, que realizó Jesús, en realidad las realizo el Padre por medio
del Espíritu Santo, Jesús solo descanso en Él:
·
Juan 5:19.
·
Juan 5:30.
·
Juan 8:28.
·
Juan 8:42.
·
Juan 12:49.
·
Juan 14:24.
Esta es la esencia
de la kenosis, Jesús se despojó de Su
posición de antes de la encarnación y tomó la condición humana de siervo, eligió voluntariamente vivir cada instante de
su vida en total dependencia de su Padre en los cielos.
Si Jesús encontró
necesario como ser humano depender exclusivamente de su Padre, para expresar su
vida a través de Él, ¿qué nos hace pensar que nosotros podremos manejar
nuestras propias vidas?
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