El Evangelio De Juan 31: Alza Tus Ojos Y Mira. Juan 4:27-41.

El día de hoy daremos por terminada la entrevista de Jesús con la mujer samaritana, recordemos que esta entrevista surgió del perfecto cumplimiento de Jesús a la Voluntad del Padre, en esa excelente obediencia él pasa por samaria en su viaje de Judea a Galilea.

Después de varias horas caminando, Jesús al sol del mediodía, se sienta junto al pozo de Jacob en la región de samaria, junto al monte Gerizim, y es ahí, cuando llega una mujer a sacar agua del pozo con su cántaro al hombro, que Jesús aprovecha para poner en práctica una vez más la pedagogía divina.

Este relato cuenta con 4 grandes temas, todos ya tratados a fondo en las enseñanzas anteriores:

·         El agua de vida para calmar la sed espiritual.

·         La confrontación del estilo de vida inmoral de la mujer.

·         La adoración en espíritu y en verdad.

·         La proclamación divina de Jesús, al afirmar el YO SOY.

Es a partir del versículo 27 que el relato cambia de tono, para llevarnos a otra verdad espiritual que edificará nuestras vidas: 27 En esto vinieron sus discípulos, y se maravillaron de que hablaba con una mujer; sin embargo, ninguno dijo: ¿Qué preguntas? o, ¿Qué hablas con ella?

El asombro de los discípulos, es como ya lo entendimos, no solo por el hecho de ser mujer, un judío ortodoxo no convive con una mujer como su igual, pero, además el hecho de ser una samaritana agravaba el asunto, pues las diferencias eran tan marcadas, que para insultarse en esa época se les llegaba a decir samaritanos a los enemigos.

¿Acaso no era un rabí? ¿Cómo podía, pues, ignorar aquella regla rabínica que decía Nadie hable con una mujer en la calle, no, ni siquiera con su propia mujer? Los discípulos estaban recibiendo una lección sobre la reivindicación de la mujer. Aquellos que creen que la biblia o el DIOS de la biblia es un machista, están no solo equivocados, sino que ignoran que es gran medida al mensaje cristiano que las mujeres han tomado su lugar de igual al lado del varón. Gálatas 3:28. Más adelante nos adentraremos en el tema de la igualdad espiritual de la mujer.

Aunque el asombro de los discípulos era grande, el profundo respeto y reverencia a Jesús hizo que ninguno se atreviera a cuestionar su accionar.

En el versículo 28 al 30 leemos Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a los hombres 29 Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ¿No será éste el Cristo?  30 Entonces salieron de la ciudad, y vinieron a él.

Vemos que la mujer ya estaba cada vez más entendida en el mensaje de la salvación, y era tal su agradecimiento con Jesús por el mensaje y su entendimiento del mismo, que a propósito dejo su cántaro, para que él y sus discípulos pudieran tomar agua, ya sabía que el agua de vida que solo Jesús da es mucho mejor que cualquier agua de pozo.

Después de dejar su cántaro corre a la ciudad, junta a la muchedumbre y les anuncia las nuevas y buenas noticias, la mujer exclama: vengan a conocer a alguien que sabe todo de mi vida, lo cual es obviamente una hipérbole, pues solo le había dicho acerca de sus 5 maridos, esto lo hizo claro con el fin de llamar la atención a sus palabras.

Su pregunta ¿no será este el Cristo? No ha de entenderse como si ella todavía dudara de Jesús, sino que lo hizo con el fin de que sus compatriotas se plantearan la pregunta de manera personal. Se nota que sus palabras surtieron el efecto deseado, pues en el verso 30 leemos que de inmediato (el tiempo en griego lo indica) salieron en busca de Jesús. Este versículo tiene mucha relación con el tema central de nuestra enseñanza.

En los versículos 31 al 34 leemos 31 Entre tanto, los discípulos le rogaban, diciendo: Rabí, come. 32 Él les dijo: Yo tengo una comida que comer, que vosotros no sabéis. 33 Entonces los discípulos decían unos a otros: ¿Le habrá traído alguien de comer? 34 Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.

En cuanto a la profundidad de este tema, lo dejamos por sentado al principio de este capítulo, Jesús en total dependencia del Espíritu Santo siempre cumplió la ley mosaica y el plan trazado desde la eternidad pasada, que se consumó con su muerte en la Cruz, esto tiene dos grandes consecuencias:

·         Su impecabilidad, totalmente necesaria para nuestra redención.

·         Cristo en nosotros sigue cumpliendo la voluntad de DIOS en la actualidad.

Pero nuestra atención ahora se va a centrar en la actitud de sus discípulos, que del asombro porque Jesús convive con una mujer y samaritana para colmo, pasan a la preocupación por las coas urgentes en lugar de las importantes.

Para ellos era la hora de la comida, Jesús después de caminar por horas, era lógico que tendría hambre, sin más le dicen: Rabí, come. Ahora son sus discípulos los que no entienden la situación.

Cuántas veces hemos estado en la misma situación que estos discípulos, cambiando lo urgente por lo importante, pensando en las coas pasajeras antes que, en las cosas eternas, no digo que no hay que trabajar, estudiar, ser parte funcional de la sociedad, pero lamentablemente muchas veces lo hacemos a costa de nuestra vida espiritual:

·         No tengo trabajo: asisto a los servicios, ya tengo trabajo, ya no hay tiempo de ir.

·         El domingo es día de estar con la familia…en casa o de paseo.

·         Hacemos planes para el domingo, porque entre semana no podemos.

·         Más tiempo en redes que leyendo mi biblia.

·         Más interesados en cosas mundanas y banales que en ser discipulados.

·         Cambiando lo urgente por lo importante, como Esaú. Génesis 25:29-34.

Por su puesto que es necesario atender los asuntos del cada día, ese no es el inconveniente, el inconveniente llega cuando esos asuntos se vuelven la prioridad en nuestras vidas, en ese momento NOS HEMOS CONVERTIDO EN UNOS IDOLATRAS, no nos arrodillamos ante una estatua de yeso, de oro, de plata, pero si hemos quitado a Cristo del trono de nuestro corazón, para poner algo más, Jesús mismo dijo dónde está nuestro tesoro ahí está nuestro corazón.

El secreto es tener los pies bien firmes en este mundo, pero la mirada bien en alto, hacia la eternidad, lo que hacemos aquí tiene consecuencias en la eternidad, no lo olvidemos de ahora en adelante al ordenar nuestras prioridades.

Los discípulos estaban en la misma situación, aún no habían comprendido que cosas eran prioritarias, y pensaban, aunque válidamente en la comida carnal, en llenar sus vientres, por eso es que ante la respuesta de Jesús solo atinan a preguntarse unos a otros ¿Le habrá traído alguien de comer?

La respuesta de Jesús en el versículo 35, como lo dijimos, está ligada con el versículo 30, su respuesta fue: 35 ¿No decís vosotros Aún faltan cuatro meses para que llegue la cosecha? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la cosecha.

Jesús ahora confronta a sus discípulos, que creían que aún no era el tiempo de cosechar, aun los campos están verdes, faltan al menos 4 meses para que se pueda ir a levantar algo de grano, este dicho indicaba que aún falta tiempo para poder ver los resultados de lo que se sembró.

No somos pocos los que pensamos de la misma manera, si bien es cierto que DIOS no lleva prisa en nuestro proceso de madurez espiritual, eso no significa que tenemos una excusa para no dar indicios de renovación en nuestras mentes:

·         ¿Ya saben en tu casa que eres cristiano por tu comportamiento diferente (no perfecto)?

·         ¿Ya notan que tu mente se está renovando?

·         ¿Tus vecinos ya se fijaron que Cristo vie en ti?

·         ¿Demostramos que la sana doctrina está bajando a nuestro corazón?

·         ¿O solo somos un grupo de pseudocristianos con la mente envanecida, pero con el corazón si no frío, hasta entenebrecido?

·         ¿Cuánto tiempo vamos a pasar en pañales? El tiempo del biberón debió acabar desde hace mucho para muchos de los que estamos aquí. Hebreos 5:12

La mentalidad que muchos aún tienen es de consumir en lugar de aportar:

·         ¿Qué DIOS puede darme hoy?

·         ¿Cómo puede DIOS bendecirme?

·         ¿Qué puede ofrecerme la iglesia a mi vida?

·         ¿Qué hacen por mí los demás (en todos lados)?

·         Debemos entender que fuimos creados para contribuir en algo, no solo para consumir.

Jesús les dice a sus discípulos y a nosotros en este día: alza tus ojos y mira los campos, que ya están listos para ser cosechados, esto lo decía por los samaritanos que al recibir las buenas nuevas por parte de la mujer, salieron de inmediato para ir a verlo.

Aunque todavía falten cuatro meses para la recolección de los cereales, la cosecha de almas ya se puede empezar a recoger ahora. Cuando Jesús pide a sus discípulos que consideren el espectáculo que forman los samaritanos al aproximarse, y que los miren como campos listos para ser segados.

Les estaba diciendo dejen de lado sus deseos de comer y vayan y hagan los deseos del Padre, hoy en día las respuestas a Jesús serian algo como esto:

·         No seas religiosos Jesús, la comida es necesaria para que el cuerpo viva.

·         No pasa nada si comemos un taco rápido y luego vamos a predicarles.

·         Tengo hambre, DIOS me dio un cuerpo carnal que debe ser alimentado.

·         No puedo descuidar el templo del Espíritu o DIOS me pedirá cuentas.

·         Etc.

Jesús no les estaba pidiendo que no volvieran a comer nunca más, ni siquiera en ese día, solo les estaba pidiendo que hicieran a un lado su ego, que dejaran de pensar en ellos mismos un rato, que dejaran de lado sus deseos y se pusieran a obedecer a DIOS.

El versículo 36 les dice Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega. 

Es una mención a la profecía de Amós 9:13. Donde el que siembra es nuestro Señor Jesucristo y los que cosechamos somos los discípulos, y esto causa que los montes destilen mosto es decir nos llenará de gozo trabajar para el Señor.

El versículo 37 Porque en esto es verdadero el dicho: Uno es el que siembra, y otro es el que siega. En nuestro país México decimos algo parecido: nadie sabe para quién trabaja, pero nosotros lo usamos de forma negativa, indicando que nuestro esfuerzo benefició a otros que ni esperábamos beneficiar.

En este caso Jesús usa el dicho para expresar todo lo contrario, como en la parábola de los obreros de la viña, no nos importa que el Señor nos contrate a unos a las 6 am y a otra 1 hora antes de terminar la jornada, lo que nos importa es Cristo y su iglesia, contribuir para que ella este bien pues es lo que Cristo más ama.

En el verso 38 leemos Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores. Un verdadero cristiano no solo no tiene envidia, es más ora, pide, clama porque DIOS envié más obreros a la viña, a la hora que sea y con la paga que Él quiera dar (pues entiende su soberanía). Mateo 9:35-38.

Que mejor ejemplo que los mismos discípulos en este momento, que no habían cosechado nada, fue la mujer la que se dirigió a la ciudad, fue ella la que reunió a la muchedumbre, fue ella la que les dio las buenas nuevas acerca del Mesías, pero serían los discípulos los que cosecharían lo que la mujer sembró. 39 Y muchos de los samaritanos de aquella ciudad creyeron en él por la palabra de la mujer, que daba testimonio diciendo: Me dijo todo lo que he hecho.

Para cerrar el relato el apóstol Juan nos muestra los resultados de la predicación de Jesús a la samaritana y a la vez de ella al proclamar en su ciudad el mensaje: 40 Entonces vinieron los samaritanos a él y le rogaron que se quedase con ellos; y se quedó allí dos días. 41 Y creyeron muchos más por la palabra de él, 42 y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo.